El director técnico del Real Madrid, Zinedine Zidane, vive uno de los peores y más amargos momentos de la presente temporada gracias a la lesión de uno de los máximos referentes de la plantilla de ‘La Casa Blanca’, Sergio Ramos.
Si bien es cierto que el entrenador del conjunto trece veces campeón del torneo internacional de clubes más importante de los cinco continentes, la Liga de Campeones de la UEFA, siempre ha buscado que sus equipos jamás dependan de un solo jugador, pues parece que el zaguero central oriundo de Camas, Sevilla, le ha dejado sumamente preocupado por la rotura fibrilar en el bíceps femoral derecho que sufrió el pasado martes 17 de noviembre en el encuentro correspondiente a la Liga de Naciones de la UEFA entre la selección de España y el combinado de Alemania que dirige Joachim Löw, el cual terminó a favor de ‘La Roja’ 6-0.
Claramente, Zinedine Zidane debe estar extremadamente angustiado, ya que Sergio Ramos, desde la salida de Cristiano Ronaldo a la Juventus de Turín el 10 de julio de 2018 a cambio de 105 millones de euros, se ha convertido en uno de los jugadores más fundamentales de la plantilla y puede que le haga mucha falta este sábado 21 de noviembre en el compromiso válido por la jornada diez de la Primera División de España ante el Villarreal CF en el Estadio de la Cerámica.
2El primer dolor de cabeza
El director técnico del Real Madrid, Zinedine Zidane, sabe que la baja de Sergio Ramos es sumamente dolorosa en este momento tan importante de la temporada, ya que él es el pilar fundamental de la defensa del combinado del teatro de La Castellana, el cual sale hacia adelante en todos los compromisos solamente si él está presente.
Entendiendo todo lo que puede ofrecer el zaguero central de Camas, Sevilla, al cuadro treintaicuatro veces monarca de la Primera División de España, el entrenador francés ha entrado en estado de alarma, debido a que el principal sustituto del español, Éder Militão se recuperaron de la Covid-19, no se encuentra al nivel suficiente como para ser el responsable de la defensa merengue.
Además, el zaguero portugués de 22 años de edad, quien resultó negativo este jueves al segundo examen PCR realizado por el parte médico del Real Madrid, viene de recuperarse de la Covid-19, por lo que se podría decir que físicamente él no pinta como el jugador más idóneo para enfrentar al Villarreal CF por la Primera División de España y mucho menos visitar el Estadio de San Siro para buscar sumar de a tres ante el Inter de Milán, así que él terminaría siendo, en vez de un alivio, un tremendo dolor de cabeza para Zinedine Zidane.
