Con el paso del tiempo, el tabaco se ha ido desmitificando y se ha descubierto que es muy perjudicial para la salud. Hace 30 años, fumar era lo más habitual y se podía hacer en cualquier sitio. Además, esta acción otorgaba al fumador una buena imagen, no estaba mal visto, y era una gran manera de socializar. En la actualidad, no se puede fumar en las terrazas de los bares y en algunas comunidades está prohibido fumar en la calle porque el humo favorece a la propagación del Covid-19.
En el 2005, se aprobó la ley antitabaco en la que se prohibía fumar en bares y restaurantes, hospitales y colegios. Esta ley, junto a las campañas de concienciación que se vienen haciendo, han supuesto un gran varapalo para la industria del tabaco. Además, cada vez es más caro comprar una cajetilla, desincentivando a muchos fumadores a seguir consumiendo.
Todo el mundo sabe que el tabaco es nocivo para la salud, pero lo que no sabes es que hay marcas que son más nocivas aún debido a su composición química. A continuación, te vamos a mostrar las marcas de tabaco más perjudiciales.
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Camel es la cuarta marca de tabaco más consumida en España. Su seña de identidad es un camello, aunque en realidad se trata de un dromedario, ya que solo tiene una joroba. Cada tipo de Camel tiene componentes químicos distintos.
El Camel de toda la vida contiene 13 mg de alquitrán, 13 mg de monóxido de carbono y 0’9 mg de nicotina. Una cajetilla de esta marca puede comprarse por 4’85€. Mientras que el Camel Blue es más suave y contiene 10 mg de alquitrán, 10 mg de monóxido de carbono y 0’8 mg de nicotina. Una cajetilla de este tipo de Camel puede adquirirse por 4’60€ en un estanco.