El consejero de Educación, Jokin Bildarratz, ha afirmado que no cree que «se vaya a dar un confinamiento total» y ha remarcado que la «ambición» de su departamento es lograr que el presente curso concluya de forma presencial en junio. En ese sentido, ha mostrado su agradecimiento al «extraordinario» trabajo de la comunidad educativa, así como al Departamento de Salud «por toda la ayuda que nos está dando» para que esto «sea posible».
En una entrevista a Onda Cero Euskadi, Bildarratz ha asegurado que la situación del covid-19 va «mejorando» en las aulas con respecto a la semana pasada. «Tener un aula cerrada es malo, pero ante la que está cayendo y viendo como va la evolución, estamos contentos, ha manifestado.
En esa línea, ha querido agradecer el «magnífico trabajo que han hecho los directores y el profesorado en el día a día para que esto sea posible», ya que para ellos «es una gran tensión, gran responsabilidad estar con 20 o 25 alumnos en el aula».
El titular vasco de Educación ha asegurado que no se ha barajado la posibilidad de cerrar las aulas en el LABI, y ha insistido en que «la ambición de este Gobierno y de la comunidad escolar general es poder terminar presencialmente las clases y se están poniendo los recursos y los esfuerzos para que eso sea así». «Somos conscientes de la estabilidad de la que dota el sistema educativo a las familias, a la sociedad, ha remarcado.
Bildarratz ha recordado que el Gobierno Vasco contempla tres posibles escenarios como son «educación totalmente presencial, híbrido entre presencial y telemática, y un tercer escenario donde todo el alumnado trabajase de manera telemática».
«La mayor parte de los centros estamos trabajando en el primer escenario, aunque hay algún centro, por ejemplo en Eibar, que está trabajando de manera híbrida porque ha habido tres cursos que están en estos momentos en casa, con las aulas cerradas, pero el centro está respondiendo de manera excepcional de manera telemática», ha explicado.
SINDICATOS
Preguntado por la situación actual con los sindicatos, tras los conflictos del inicio de curso, el consejero ha asegurado que no percibe que «estén en pie de guerra». «Es verdad que comenzamos el curso escolar con una tensión importante pero en estos momentos estamos trabajando, nos reunimos con periodicidad, tenemos un calendario de trabajo y en eso estamos», ha señalado.
De este modo, ha expresado su «voluntad de diálogo con todo aquel partícipe o miembro del conjunto de la Educación», así como la «ambición de acuerdo» para lo que «se tiene que dar la negociación». A su juicio, «todo esto no va a funcionar si verdaderamente no funcionamos de una manera discreta».
Por boca de este consejero no va a salir ningún tipo de valoración, de información, porque lo que verdaderamente me importa es tener la mano tendida hacia los sindicatos, yo también percibo por parte de ellos que tienen la mando tendida hacia el departamento. Estamos trabajando con normalidad, y así tenemos que hacerlo para que verdaderamente consigamos con ese diálogo, con esa voluntad de negociación, dar con un acuerdo», ha manifestado.
Jokin Bildarratz se ha mostrado convencido de que «es una legislatura ambiciosa en todos los sentidos para la Educación» y ha afirmado que está viendo «una actitud muy positiva hacia nosotros en todos los encuentros». En su opinión, «creo que en los próximos años todo lo que tiene que ver con la educación va a darnos verdaderas sorpresas positivas».
LEY CELÁA
Preguntado también acerca de la conocida como ‘Ley Celáa’, el consejero vasco ha asegurado que no le toca «valorar el debate que se va generando en torno a esta ley» porque «es el momento del debate de los parlamentos y los grupos parlamentarios».
No obstante, ha destacado que «por primera vez en las comunidades autónomas van a poder establecer el 50% del currículum, que es un aspecto muy importante para nosotros como comunidad autónoma del País vasco». Respecto a la lengua vehicular, ha opinado que «muchas veces se montan fuegos de artificio donde quizá no merece la pena que se den tales».
Asimismo, ha señalado que uno de sus objetivos prioritarios para la legislatura es dotarse de un pacto, que ha denominado ‘Hezkuntza Hitzarmena’, con las distintas fuerzas políticas para «trabajar en pos y en pro de una buena educación».
Bildarratz ha asegurado que se ha «sorprendido» ante la actitud «positiva» que ha recibido por parte de los diferentes grupos parlamentarios, «empezando por EH Bildu, pasando a Podemos, y terminando con el PP+Cs, además del PNV y PSE, que hemos sido capaces de poner un pequeño diagnóstico en común, hablar sobre Educación, y sobre todo priorizar el alumnado, la next generation».
«Vamos a ver si soy capaz de mantener este ambiente, este espíritu, para que verdaderamente nos dotemos de una verdadera actitud de pacto para lograr ese Hezkuntza Hitzarmena», ha concluido.