Las sensaciones son buenas. Y el futuro se presenta como pocas veces se le han dado al asturiano. Y es que volver a la Fórmula 1 y con Renault es uno de los sueños que más estaban esperando los seguidores incondicionales de Fernando Alonso. Lo hará de lleno a partir del próximo año, 2021, para ganar enteros en lo que tiene que ver con la nueva normativa de 2022.
Allí se espera que el astur pueda aspirar a cosas importantes, que es para lo que se decidió a amoldarse a un regreso a la categoría reina. Ahora, y para aclimatarse a este definitivo paso, el de Oviedo ha vuelto a subirse al Renault para realizar diferentes tests: un filming day de 100 km en Barcelona, dos en Bahrein, Abu Dhabi… todo ello entra dentro del plan que tiene Fernando Alonso para asaltar un Mundial que se prevé emocioanante.
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El asturiano ha pasado estos dos días en el trazado de Yas Marina donde, precisamente, le han vetado para rodar en los test de jóvenes pilotos. Salvo cambio de última hora en la decisión de la FIA, Alonso no podrá probar con el coche de 2020 en esos dos días ya que supera con mucho los requisitos máximos para esas dos jornadas.
Por eso estos entrenamientos privados de Renault en Abu Dhabi, como los que hizo en Bahréin dos semanas atras, son fundamentales. La ausencia de jornadas de test oficiales hasta la pretemporada de 2021 hacen que la preparación de Alonso para su regreso sea mínima, al menos en términos de tiempo pilotando.
Él mismo admitía que físicamente se está machacando, y está intentando ganar de nuevo musculatura que ha perdido en estos años fuera del Gran Circo, ya que ni el Toyota de Le Mans o el del Dakar son tan físicos como un Fórmula 1, ni el corto tiempo que ha estado dedicado a Indianápolis le ha hecho recuperar la fortaleza que tenía antaño.