El personaje animado más famoso y carismático de la historia cumple hoy 92 años. Fue un 18 de noviembre de 1928 cuando el ratón Mickey Mouse apareció por primera vez en la gran pantalla. El debut del personaje se dio en el cortomatraje ‘Stemboat Willie’, que se proyectó en el Colony Teather de Nueva York. Desde entonces, la magnitud del icónico animal se ha ido engrandeciendo hasta convertirse en un referente transversal a un buen número de generaciones.
Pese a todo, la idea inicial de Disney no era la de centrar su universo creativo en un roedor, sino en otro animal animado, Oswald, ‘el conejo de la suerte’. Un corto inédito que se proyectó en la Academia de Cine Británica lo sacó a la luz.
Hay que recordar, sin embargo, que el famoso ratón iba a llamarse Mortimer, pero la esposa de Walt Disney, con gran sentido del marketing, le dijo a su marido que era un nombre pedante. Propuso uno más sencillo y pegadizo, Mickey, y la verdad es que le ha ido como un guante.Cabe destacar también que no solo Mickey hizo su debut en ‘Steamboat Willley’, también su encantadora pareja Minnie, que le ha acompañado desde entonces.
Así pues, vamos a celebrar el cumpleaños de esta mediática pareja observando cómo ha evolucionado el personaje más conocido de la historia de los dibujos animados a lo largo del tiempo. Hay que reconocer que para haber cumplido 92 años está hecho todo un chaval.
6NUEVOS CAMBIOS: NACE ‘EL CLUB’
La explosión de la II Guerra Mundial en la década de los cuarenta afectó, lógicamente, a la proyección de cortos animados. Aunque se dejaron de emitir los cortos de Mickey Mouse, a este le dio tiempo a «alistarse» al ejército de EEUU, siendo un elemento más de la propaganda ‘yankee’ en la lucha contra los nazis.
Motivado por su salida de los cines y la irrupción de un nuevo electrodoméstico en los hogares estadounidenses, se creo el ‘Club de Mickey’, un programa que se emitió entre 1955 y 1959 y que ha tenido diferentes versiones hasta nuestros días. Se introdujeron, de nuevo, ciertos cambios estéticos en el personaje, como las cejas, que regresan a su cara.
