El pasado fin de semana fue uno de los más duros en la vida de Kiko Rivera. Hundido, el Dj se sentaba en el plató de «Cantora: la herencia envenada» y desvelaba, muy dolido, algunos de los engaños que Isabel Pantoja habría cometido con la herencia de Paquirri, con la gestión de la finca que pertenece a ambos y, principalmente, con los objetos personales de su padre, Paquirri, cuya existencia le ha ocultado durante toda su vida. Unos objetos que pertenecen a Francisco y a Cayetano Rivera y que Kiko ha asegurado que lucharán porque puedan recuperarlos.
Pese a contar con el apoyo incondicional de Irene Rosales, de sus hermanos y de la familia Rivera, Kiko confesaba después de su última aparición televisiva que tenía el corazón roto y que nunca se había sentido tan solo. Sin embargo, algo ha hecho click en su cabeza y el artista ha empezado la semana con una clara y optimista declaración de intenciones. «Nueva vida. Nuevos retos. Intentaré que cero lagrimas. Y sobre todo mucha música que viene en camino. Que tengáis un bonito día os quiero muushooo».
Éste es el mensaje que Kiko ha publicado en su cuenta de Instagram y con el que deja claras sus intenciones de empezar de cero, intentando ser feliz y afrontando con fuerza y ganas un futuro que, por lo menos en lo que a su profesión se refiere, parece de lo más prometedor.