Luis Mateo Díez, Premio Nacional de las Letras: «Corren tiempos a la baja, estamos tocados del ala»

El escritor Luis Mateo Díez, galardonado con el Premio Nacional de las Letras, ha lamentado que los actuales tiempos «corren a la baja» y la sociedad está «tocada del ala», debido tanto a unos políticos «de bajo calado» como a las consecuencias generadas por la pandemia de coronavirus.

«La desgracia universal se compagina entre determinados mandatarios que administran la política de bajo calado y a la vez en lo cotidiano: nos ha caído una epidemia impensable, que ha demostrado nuestra extrema fragilidad y lo poca cosa que somos», ha lamentado el autor.

Precisamente, Díez ha reconocido que la pandemia le ha «tocado» y ha vivido estos últimos meses como algo «terrible». «Tengo muertos cercanos, no soy de los que puede esconder esto porque ha sido terrible. Pienso que lo he sobrellevado como buenamente he podido, con sucesos trágicos, mucha disciplina y sentido del comportamiento», ha añadido.

Uno de los rasgos de la literatura del académico es la mostrar mundos cercanos a lo rural, un tema que preocupa al autor. «El futuro de la ‘España vacía’ es una España sin destino. Lo que está vacío es mucho más duro de lo que pensamos y decimos y creo que hay un destino de esta España hacia el olvido absoluto», ha señalado.

El jurado ha destacado esa apuesta por la cultura oral que está «en progresiva desaparición» y que no encuentra en los nuevos medios de comunicación. «Por ejemplo, las redes sociales es un mundo al que no pertenezco y no me interesa, aunque sea un invento fascinante y maravilloso. Pero exige un tiempo que no tengo: mi tiempo no es el de las redes sociales, es otro distinto», ha afirmado.

Díez, quien reconoce que la llamada del ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes, le ha pillado «desprevenido», se ha mostrado «contento» por el reconocimiento. «Cuando te llega un premio así al que no has tenido que optar me lo tomo como si fuera el agradecimiento de mis lectores», ha señalado, para luego reconocer que todavía no ha pensado qué hacer con el dinero del galardón.