Acusado por atentados de Cataluña, herido en la explosión de Alcanar, muestra su arrepentimiento

Mohamed Houli Chemlal, acusado de formar parte de la célula yihadista que atentó en Cataluña el 17 de agosto de 2017, ha asegurado ante el tribunal de la Audiencia Nacional que juzga estos hechos que ratifica todo lo que ha declarado hasta ahora y ha afirmado que está «arrepentido».

Houli Chemlal es el primero de los tres acusados en el juicio que ha comenzado este martes en declarar ante el tribunal de la Sección Tercera de la Sala de lo Penal, presidido por Alfonso Guevara. Tras un habitáculo de cristal, donde se encontraba acompañado de los otros dos acusados, ha recordado que durante la instrucción de la causa declaró voluntariamente.

Asimismo, este acusado, que resultó herido por la explosión de una vivienda en Alcanar (Tarragona) donde se preparaban los explosivos para atentar en Barcelona, ha indicado que se acoge a su derecho a no declarar pero que ratifica todo lo que ha dicho hasta ahora en este procedimiento y ha mostrado su arrepentimiento.

«Mi arrepentimiento se basa en que todas las veces que me han llamado para declarar he declarado, incluso he declarado voluntariamente», ha afirmado a preguntas de su abogada, María del Carmen González, quien le ha preguntado si era un sentimiento «sincero». «Obviamente», ha dicho Holui Chemlal.

VISIONADO DE VÍDEOS Y FOTOGRAFÍAS CON EXPLOSIVOS

A petición de la fiscal Ana Noé, la Sala ha visionado vídeos y fotografías en los que aparece el acusado manipulando explosivos con otros miembros de la célula yihadista. También se han reproducido las declaraciones que prestó ante el entonces titular del Juzgado Central de Instrucción número 4 Fernando Andreu, ya que la representante del Ministerio Público considera que incurrió en contradicciones en sus comparecencias.

La Fiscalía solicita para Houli Chemlal la pena más alta para los tres acusados, 41 años de cárcel por los delitos de pertenencia a organización terrorista, tenencia, depósito y fabricación de explosivos, y conspiración para cometer estragos terroristas, al entender que «formó parte de una célula criminal local seguidora de los postulados de la organización terrorista Estado Islámico reunida en torno a la figura del fallecido imán que fue de las comunidades ‘El Fath’ y ‘Annour'», de Ripoll.

En el escrito de acusación provisional añade que «mantenía» con el imán una «buena relación de amistad» y que comenzó a «mostrar interés por el islam y a asistir también regularmente a la mezquita».

A preguntas de su defensa, Holi Chemlal ha afirmado con un simple «sí» a varias preguntas sobre su colaboración con la justicia, como que contactó voluntariamente con el equipo de seguridad del centro penitenciario de Alcalá-Meco para asumir los hechos, si bien el interrogatorio de la abogada ha sido interrumpido en varias ocasiones por el presidente del tribunal porque el acusado estaba respondiendo cuando inicialmente se había acogido su derecho a no declarar.