La fiebre es uno de los padecimientos más comunes por los que debe pasar el ser humano de manera habitual. Ahora con este estado de alarma que vivimos todos como consecuencia de la pandemia del Covid-19, el tener fiebre es ir directamente al médico, pues se trata de uno de los síntomas de mayor arraigo para determinar si alguien posee o no el virus. Claro, muchas veces no es el virus, sino otros tipo de afectaciones, por lo que es fundamental conocer gran parte de sus implicaciones para que nada nos coja por sorpresa.
Y es que, con este asunto de la fiebre, una de las dudas que más se suele ver en tiempos modernos, es que las personas se preguntan los motivos por los que esta fiebre puede ser aún más intensa en horas de la noche. Lo cierto es que te traemos una serie de datos muy importantes para que sepas la razón por la que sucede, y de qué forma puedes hacerle frente a esta adversidad.
1Detalles que marcan la diferencia
Uno de los ejes principales para esclarecer el por qué la fiebre aumenta por la noche, es precisamente traer a colación una definición con el hipotálamo. Y es que, en esto queremos hacer énfasis ya que es una parte del centro del cerebro que de alguna manera viene a controlar una gran cantidad de funciones relevantes de nuestro organismo. Entre esa diversidad está la temperatura corporal.
Lo que sucede es que con los receptores de frío y calor, se emiten las señales que van a los músculos, o tal vez al hígado para producir un calor metabólico. Esto lo que hace más que todo es subir la temperatura tomando en cuenta las necesidades. En otro aspecto, regulan la disposición del calor a través de la piel y los mismos pulmones. Con esto, se logra palabras más palabras menos que haya condiciones normales y no se produzca fiebre ni hipotermia, sino una temperatura adecuada, entre 35 y 37 grados.