Dentro del tenis español, la idea de que surja un nuevo Rafael Nadal que ilumine todo no ha frenando la progresión de una nueva generación que quiere hacer su propia historia. Si bien hay algunos que están luchando por hacerse un nombre, como Pablo Carreño Busta, también hay otros que van un escalón por debajo y que comienzan a luchar en el mundo de las raquetas. Un buen ejemplo de esa nueva generación que viene pujando fuerte es Carlos Alcaraz, pero además de él hay uno un poco mayor que también aspira a llegar a lo más alto: Alejandro Davidovich.
El malagueño ha ido escalando posiciones poco a poco desde que comenzará su carrera como profesional, pero es justo ahora que está a las puertas del Top 50 que su nombre empieza a sonar con más fuerza. Y es que en esta campaña atípica, Davidovich ha estado exhibiendo un buen nivel que lo ha hecho progresar en torneos importantes y ahora cuenta con una gran confianza con la que aspira a seguir mejorando.
La confianza es la clave de Davidovich
Tras un comienzo más que irregular al principio de esta temporada, el parón por la pandemia del coronavirus le hizo ajustar algunas cosas de su juego y en el regreso lo ha hecho de una mejor forma; no solo por su físico, también en lo mental. Davidovich participó en siete torneos y dejó un récord de 16 victorias y siete derrotas, pero con partidos muy buenos como ante Cilic, Novak y Zverev, en la primera semana en Colonia. Realmente ha sido su confianza lo que lo ha hecho elevar su nivel.
«Me veo con muchisíma confianza y estoy progresando cada día. Mi meta es acabar el año alrededor del Top-50. Si logro terminar ahí pues será extraordinario. Estoy muy feliz del progreso que estoy teniendo esta temporada, con partidos de enorme exigencia. Uno quiere marcharse de vacaciones pero estoy disfrutando en la pista y me siento muy bien en ella», comentó ante los medios Davidovich tras clasificar a los octavos de final en el París Bercy.
Por un 2021 mucho mejor
Si bien el malagueño ha ido creciendo a lo largo de la campaña, si dejó claro que todo cambió a partir de su derrota tan clara ante Zverev en el Abierto de Estados Unidos, por 2-6, 2-6 y 1-6. «En el US Open, ante Sascha Zverev, me sentía muy inferior a él. Y creo que se pudo ver con mi actitud en la cancha y por la forma en la que competí durante ese choque. A raíz de ese momento, logrando victorias y agarrando confianza, puedo chocar ante un Top-10 sabiendo que puedo hacerle partido o incluso ganarle«, agregó Davidovich ahora mucho más seguro de sí mismo.
Pese a su buena mentalidad, el español cayó en octavos del Master 1000 de París ante Schwartzman, quien se está acostumbrando a ser su verdugo. Sin embargo, no cabe duda que de seguir su progresión puede llegar bien al 2021. Esa confianza y esos ajustes que ha hecho lo pueden ayudar, pero lo cierto es que el tenis español va bien encaminado y Davidovich puede ser parte importante de ese relevo.