Una de las medidas de protección para evitar la propagación del COVID-19, es el uso de la mascarilla. Aunque esto puede parecer un proceso muy simple, el uso prolongado de éstas es lo que representa todo un reto.
Este “accesorio” por ser un elemento nuevo en nuestra vida cotidiana, no estamos acostumbrados a usarlo y, en muchos casos, la llevamos de forma incorrecta. Debemos tener en cuenta que en la actualidad existen diferentes tipos de mascarillas que proporcionan varios niveles de protección. De acuerdo con las recomendaciones para ponerse, usar, quitarse y desechar una mascarilla la Organización Mundial de la Salud (OMS) informa que:
- Antes de ponerte una mascarilla lávate las manos con un desinfectante a base de alcohol o con agua y jabón.
- Evita tocar la mascarilla mientras la usas. Si lo haces, lávate las manos de nuevo.
- Cámbiate de mascarilla tan pronto como esté húmeda y no reutilices las mascarillas de un solo uso.
- No toques la parte delantera de la mascarilla. Se debe quitar por detrás. Si es de un sólo uso, deséchala inmediatamente en un recipiente cerrado y lávate las manos con un desinfectante a base de alcohol o con agua y jabón.
- Como última recomendación, para aquellas personas que viven en edificios con ascensor, ponte y quítate la mascarilla dentro de tu vivienda. Los ascensores y las escaleras pueden ser zonas de alta contaminación.
Habitualmente las mascarillas quirúrgicas son utilizadas por los profesionales sanitarios para proteger a los pacientes de infecciones, sin embargo, como una de las características generales de las mascarillas es que deben cubrir siempre tu boca, nariz y mentón; tienen que permitir un flujo correcto de aire, pero siempre se debe estar bien ajustada para que no existan escapes. Un gran ejemplo de la salida sería: por los laterales; y es de suma importancia que estén compuestas por un material filtrante y adecuado a cada uso.
Las medidas de seguridad e higiene siguen implantadas en algunos países, como en otros que ya están saliendo de la cuarentena. Sin embargo, algunas personas aplican ahora la “nueva normalidad” y no están utilizando mascarillas, sin embargo, en algunos países sigue siendo obligatorio este uso para toda la población mayor de 6 años en espacios públicos donde no se pueda mantener la distancia de seguridad entre personas de dos metros.
Pasos para una colocación correcta de la mascarilla
- Ubicar el borde superior de la mascarilla, el cual se diferencia pues incluye una tira metálica fina.
- Debemos colocar los dedos índice y pulgar sosteniendo las dos cintas o lazadas superiores apoyándonos en la parte superior de la nariz y finalizando al colocarlos en las orejas.
- En el caso de que la mascarilla sea con ligas, simplemente se debe realizar el proceso anterior y amarrar detrás de la cabeza.
Medidas para evitar que resbalen las mascarillas
Las mascarillas deben mantenerse en su sitio una vez colocadas. Sin embargo, por la mala manipulación al momento de ponerla suelen moverse o resbalarse. Para que esto no suceda es conveniente seguir las siguientes recomendaciones:
- Asegúrate que las ligas sean firmes y suaves. Es importante fijarte que las ligas sean firmes puesto que estas estarán ajustadas a tu cara.
- Ajusta el tamaño ideal a tu rostro.
Al realizar este proceso, evitará estar manipulando constantemente la mascarilla.
Al colocar la mascarilla se debe tomar en cuenta que el filtro siempre tiene que ir hacia fuera puesto que en ningún caso las caras de las mascarillas deben invertirse dado que presentan un diseño el cual es de triple capa, siendo la primera capa la exterior, o coloreada. Esta es una capa repelente de fluidos, aunque de poco efecto; la capa central elaborada de celulosa más compacta siendo un filtro para las bacterias y la capa interna o blanca es la que absorbe las sustancias.
De esta forma se deduce que la manera correcta es asegurándonos que la parte coloreada, verde o azul, esté hacia el exterior y la blanca hacia el interior. La colocación correcta de la mascarilla es importante, puesto que si lo hacemos incorrectamente no nos estamos protegiendo de micropartículas que impidan la circulación del virus.
También es importante asegurarnos que las mascarillas nos ajusten bien a la cara, pues de lo contrario dejaríamos espacios y nos expondríamos.
No se debe colocar dos mascarillas quirúrgicas. No se deben colocar puesto que esto no sustituye a una mascarilla con filtro, ya que al no tener éste no nos protege del ambiente.
Cómo colocar una mascarilla quirúrgica y hacer su uso más eficiente
Colocarla correctamente
Asegúrate que te ajuste bien al tamaño de tu rostro y así evitarás dolor e irritación en las orejas. Actualmente en el mercado también existen otros modelos, por ejemplo, las que se amarran detrás de la cabeza, este modelo evita la incomodidad en las orejas. Estas ofrecen un mejor soporte y estabilidad.
Evita la irritación
Para evitar la irritación por el roce de la liga de la mascarilla, es conveniente aplicar en la zona una crema humectante las veces que sean necesarias en el día, teniendo un especial cuidado de no tocar tu rostro para evitar contagiarnos.
