La pandemia nos está obligando a cambiar buena parte de nuestros hábitos de ocio. Y esa no es, ni de lejos, la consecuencia más grave de la crisis ocasionada por el coronavirus. Pero, en un país como el nuestro, en el que la vida social y los bares son parte fundamental de nuestra cultura, se deja notar esta modificación de las costumbres. Debido a ello, el sector de la hostelería afronta graves dificultades económicas y se complica cada vez más su supervivencia. En este contexto, Schweppes ha querido lanzar una ambiciosa e impactante campaña publicitaria para apoyar a este sector tan golpeado por la pandemia.
Tirando de sentido del humor e intentando hacer de tripas corazón, la campaña de esta marca de tónica intenta levantar los ánimos de los hosteleros y los ciudadanos. Schweppes va a desplegar en Madrid unas lonas en varios edificios, de momento ya ha puesto uno, que llamarán la atención de los viandantes y darán mucho de qué hablar.
5A quien madruga…
A esta campaña se han adherido algunos de los grupos de restauración más populares y versátiles de nuestro país. Estos establecimientos apuestan por el servicio continuo e intentan capitalizar el consumo durante el día. Todos ellos ya han adaptado sus horarios y servicios para acoger la nueva demanda. Dichas empresas ofrecen formatos pensados para abrir el apetito a las 20:00 horas y para acompañar con cualquiera de las referencias de las gamas Premium u Original de Schweppes, ya sea mezcladas o en un refresco bien preparado.
Así es como Schweppes, que hace años ya vaticinó la apuesta por el consumo de día —donde encaja mejor el trago solo, sin mezclar, aquel que se saborea tranquilo—, apoya a la hostelería. Ahora, que vemos cómo delante de nuestros ojos se están redefiniendo las reglas del ocio. Se impone el “tempraneo”, con todos los beneficios que ello conlleva: se aprovecha más el día, descansamos más y mejor…Y, por qué no decirlo, porque ya sabemos eso de que “a quien madruga, Dios le ayuda”.