Se dice siempre eso de que “el perro es el mejor amigo que el hombre”. Y, según recientes descubrimientos, parece que los perros están hechos para ser generosos por naturaleza. Es decir, para ser amigos entregados y dispuestos a darlo todo por sus compadres. Así cualquiera se hace amigo de un perro, sabiendo que este será capaz de ir hasta el final por ayudarle a uno. Es posible que ya sospechásemos eso, pero un grupo de científicos ha sido capaz de demostrarlo con evidencias de peso.
“Compartir es vivir”, también es algo que decimos mucho. En el caso de los perros eso es así de forma literal. Dicha investigación demuestra que los perros, de forma espontánea, comparten los objetos que les importan y la comida con sus amigos caninos. Y no solamente eso, sino que están ansiosos por hacerlo y disfrutan haciéndolo.
4Compartir con los amigos
Los investigadores concluyeron que los perros muestran un deseo consistente de compartir sus golosinas con perros que conocen. No obstante, es tres veces más improbable que hagan lo mismo con perros que no le son familiares o que no habían visto nunca antes. También descubrieron que los perros eran igualmente proclives a compartir tanto si su compañero estaba en su recinto como si estaba en el recinto de al lado.
Eso sí, cuando los perros estaban solos y no veían a sus compañeros disminuían las recompensas. Su deseo de compartir era menor. Es lo que se conoce como el fenómeno de facilitación social: cuando hay otro individuo cerca, tienden a presentar estas conductas con mayor frecuencia.