Este martes 03 de noviembre, a las 21:00 horas, no es un día ni una hora cualquiera; en ese momento se decidirá de forma casi definitiva el destino del Real Madrid en esta edición de la Champions League al enfrentar en el Alfredo Di Stefano al Inter de Milán. Una final casi que adelantada, que por el rival de tanto prestigio si que podría serlo; pero más bien lo será por la importancia de un choque que les dará vida en un grupo que ya se complicó por completo o los terminará de sepultar en su torneo favorito.
Los de Zidane recibirán al conjunto italiano con la moral un poco más alta, dada su buena posición en Liga (son segundos con un partido menos) y además por los buenos síntomas de mejoría que han dado en los últimos encuentros. Sin embargo, en Europa la historia cambia bastante y los blancos padecen de un bajo nivel que ya comienza a ser crónico desde hace dos años; precisamente cuando un tal Cristiano Ronaldo se fue con sus 50 goles bajo el brazo. El Alfredo Di Stefano será el escenario donde se dictara sentencia a una temporada europea muy corta si los locales no despiertan en un partido contra el Inter que ya es catalogado como una final.
2Una actitud que invita a la esperanza
Aunque es claro que el Real Madrid reaccionó más por empuje y fuerza que con su fútbol contra el conjunto alemán, las cosas mejoraron para un conjunto blanco que supo empatar al final. La entrada de un Hazard más activo, el regreso del Benzema goleador o que jugadores como Casemiro aumenten poco a poco su nivel invita a creer que los de la capital española aún pueden hacer algo en Europa en esta campaña.
Tampoco se puede obviar que en el impulso que les da su situación en LaLiga y que este los puede ayudar a mejorar en Champions Legaue. La goleada ante el Huesca (4-1) también dejó buenas sensaciones que invitan a creer en una mejoría dentro del Real Madrid, que obviamente aún no ha superado sus irregularidades; pero ver a Hazard marcando y en buen estado, con Benzema goleando, consiguiendo resultados positivos, todo eso ayuda a pensar que los blancos están subiendo el nivel poco a poco. No obstante, ahora deberán refrendar esas buenas sensaciones recuperadas en los últimos choques ante un Inter muy difícil.