Es bien sabido por todos que los programas de televisión ejercen una influencia muy marcada en la sociedad. Es decir, en las audiencias que miran tales contenidos. La telerealidad desde hace muchos años se ha consolidado en el mundo de los audiovisuales, y si de producciones de altura se trata, no podemos dejar de mencionar a La isla de las tentaciones. Desde su arribo a las pantallas, ha logrado despertar una amplia diversidad de opiniones y sensaciones. Pero lo que más engancha es precisamente el apartado del amor y todo esos pecados que todos sabemos que están a la orden del día.
Si bien es cierto que la televisión cumple una función trascendental que es informar y entretener, la visión de La isla de las tentaciones ha ido mucho más que estos dos conceptos, y claro, aunque existen cuestionamientos por la temática, esto siempre ha gustado, y a la gente les fascina saber qué tantas implicaciones hay cuando se tiene un compañero sentimental. Como los pecados están siempre con nosotros, La isla de las tentaciones los alimenta, pues sí, nosotros te vamos de desvelar cada uno de ellos, y cómo repercuten en las relaciones de parejas.
4Amor y dramas a la orden del día
En La isla de las tentaciones lo que prolifera son los problemas de parejas, el amor pareciera estar allí, pero esos shows se hacen evidentes. Lo pudimos observar con Inma y Ángel, que con su relación que tenía menos de un año, los problemas los arropaban completamente.
Por supuesto que el afecto puede estar en los primeros instantes, pero estos sí que han caído en dilemas donde dejaron mucho que deseas. La confrontación era el plato principal, y es allí, donde debemos decir que cuando hay amor, realmente los dramas no tendrían que colocarse como el principal protagonista. Y cuando es así, no hay amor simplemente se acabó.