El Real Madrid regresó al lugar del crimen. A un Alfredo Di Stefano que pasó de ser su fortín a su particular Muro de los Lamentos, donde ya encadenaba dos derrotas consecutivas, ante Cádiz y Shakhtar Donetsk, ambas muy dolorosas y estrepitosas. Si bien las dos fueron en competiciones distintas, LaLiga y Champions League, respectivamente; ahora le tocó comparecer nuevamente en el campeonato español ante un Huesca que juega mejor de lo que dice la tabla de posición y frente a los oscenses resolvió el choque con un triunfo contundente, por 4-1, que sirve para muchas cosas además de lavar su imagen.
Con un resultado tan contundente muchos podrían pensar que los problemas son pasajeros o que se exageró, pero nada más alejado de la realidad. Los males de los merengues son más profundos de lo que se cree; no obstante, la goleada da esperanzas de que la recuperación puede comenzar a fraguarse y solo la regularidad de alguna de sus piezas podrán certificarla en un futuro no muy lejano.
3Zidane mandó un mensaje pensando en el Inter
Otra de las conclusioens que se pueden sacar tras la victoria del Real Madrid ante el Huesca es que Zidane está concentrado en LaLiga, pero realmente quiere hacer un buen papel y mejorar en Champions. Eso se comprueba rápidamente con los cambios que realizó el francés luego de que Valverde marcó el tercer gol del duelo. Después de ese tanto el partido estaba sentenciado y a partir de allí comenzó un festival de cambios que dieron pistas concretas de quienes jugarán ante el Inter de Milán.
Aunque unos minutos antes de ese tercer gol ya había salido Lucas Vázquez, por una sobrecarga que esperan pueda recuperarse pronto, luego se fueron de una tajada Valverde, Asensio y Hazard; poco más adelante salió Casemiro para darle un poco de descanso. Todos ellos, unidos a Varane, Mendy y Kroos que no entraron de inicio, hacen medio equipo que jugará ante el conjunto italiano. Courtois, Sergio Ramos y Benzema completarán el «11» de lujo de un Zidane que espera empiece su recuperación en Champions.
