A veces, cuando no podemos más en nuestro trabajo, no soportamos a nuestros jefes o a algunos de nuestros compañeros, nos imaginamos trabajando en casa, sin horarios fijos, incluso en pijama siendo freelance. Es cierto que con esto del Covid y el teletrabajo la idea se ha convertido en realidad para muchos y le ha quitado mucho romanticismo al hacerse patentes también las desventajas.
Sin embargo, la idea de ser su propio jefe si cala fuerte en algunas personas. Por eso vamos a dedicar este artículo a explicar el concepto de freelance.
Qué es un freelance
El trabajo como freelance se solapa en ocasiones con el de trabajador autónomo. Un freelance es una persona que trabaja de modo independiente, por su cuenta, ofreciendo sus servicios profesionales a diferentes clientes y empresas sin establecer un contrato de exclusividad con ninguno.
Los cambios de mentalidad social y el avance de las tecnologías están favoreciendo el aumento exponencial de los trabajadores freelance. Existen muchas áreas de trabajo en las que pueden encajar los trabajadores freelance, especialmente aquellas ligadas a las habilidades, conocimientos o talentos en el mundo digital como programadores, diseñadores gráficos, traductores, profesores, redactores de contenido, etc.
Cómo trabaja un freelance
El trabajo de freelance suele precisar de una buena conexión a Internet y de grandes dosis de creatividad. Por eso, lo más habitual es que trabajen desde su propia casa, aunque en ocasiones contarán con una oficina o un espacio de trabajo en un centro de coworking. El freelance trata directamente con su cliente, estableciendo las características, el precio y los plazos de entrega de los proyectos.
Suele ser habitual que los trabajadores freelance establezcan un anticipo antes de comenzar el trabajo. La autopromoción y las recomendaciones suelen ser las principales maneras que tienen los freelance de obtener nuevos trabajos.
Cómo darte de alta como trabajador freelance
La aventura de emprender como freelance pasa igualmente por la gestión de los trámites con la administración. Para empezar tienes que darte de alta como autónomo. para ello tienes que ir a Hacienda y darte de alta en el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) presentando el modelo 840 durante el primer mes de tu actividad. Posteriormente, en la Tesorería General de la Seguridad Social tienes que darte de alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos, para ello tienes que presentar el modelo TA.521, junto a la copia de alta en el IAE.
Al darte de alta en el IAE tienes que especificar cuál es la actividad que vas a realizar eligiendo el epígrafe que mejor se adapte a tu trabajo. Con estas dos gestiones ya puedes comenzar a emitir facturas.
Como trabajador freelance eres responsable de todo lo relativo a la facturación y el pago de los impuestos como el IVA y el IRPF. Puedes hacerlo por tu cuenta, aunque muchas personas contratan para ello los servicios de un gestor. Es importante que cuentes con un modelo de factura en el que consten todos tus datos y también los de tu cliente. En las facturas debe constar tanto el trabajo realizado como el importe. Además trimestralmente tienes que pagar a Hacienda el IVA que has recibido.
Plataformas freelance en las que es posible encontrar trabajo
Encontrar los primeros trabajos puede ser lo más difícil. Por eso te aconsejamos que hagas uso de algunas plataformas especializadas en las que se publican diferentes ofertas de trabajos para freelance.
Fiverr: la ventaja de esta página es que permite a los freelance mostrar algunos proyectos terminados para que los clientes potenciales puedan elegir con una base.
Upwork: te proporciona algunas herramientas que pueden resultar útiles en los inicios de tu aventura como trabajador freelance.
Simply Hired: a través de esta página puedes buscar trabajos que encajen en tu temática en la zonas en la que vives. Tiene un blog que puede resultar útil.
PeoplePerHour: esta es una de las páginas freelance más grandes del mundo. Cada trabajador tiene una calificación que le van dando los clientes por los trabajos realizados.
Freelancer: es otra de las páginas más importantes y tiene más de 32 millones de usuarios.
Por su puesto hay muchas más plataformas donde es posible encontrar trabajo, entre ellas no debemos olvidar las redes sociales, especialmente LinkedIn.
Ventajas y desventajas de trabajar como freelance
Como todos los trabajos, ser freelance tiene ventajas y desventajas. Entre las primeras está el poder trabajar prácticamente desde cualquier lugar del mundo donde haya una buena conexión a Internet. El hecho de poder adaptar tus horarios y administrar tu tiempo es una de las ventajas más valoradas por muchos freelance. Serás tú quien elija a tus clientes y proyectos y además, aprenderás con cada uno de ellos. Ahorrarás tiempo y dinero al no tener que trasladarte de un sitio a otro.
Sin embargo, también hay una cara mala y es la inseguridad. Trabajando como freelance solo cobras por los trabajos realizados y eso quiere decir que seguramente haya meses buenos y otros malos.
Además, trabajar como freelance exige un nivel de autoconocimiento y de aceptar la responsabilidad. Al ser freelance seguramente pases muchas horas en soledad, y hay personas que eso no lo llevan bien o que tienen una tendencia natural a procrastinar. También puede darse el caso contrario, personas que nos sepan delimitar sus jornadas de trabajo y acaben trabajando muchas más horas de las que harían en un trabajo por cuenta ajena.
Y ¿cuánto puede cobrar?
Esa puede ser la pregunta del millón. Los trabajadores freelance tienen que aprender a valorar su trabajo siendo realistas y competitivos, conociendo los valores que se mueven en el mercado.
El nivel de experiencia y las valoraciones positivas, los recursos necesarios para realizar el trabajo, el tiempo que durará son algunos de los parámetros que se deben valorar a la hora de hacer los presupuestos.Tienes que plantearte cómo vas a cobrar, si por hora, por encargo, por trabajo terminado, etc.
Hacerse con un fondo de emergencia con el que poder aguantar en las épocas de vacas flacas es importante.
Además, no olvides que un freelance tiene que hacerse con una cartera de contactos. Para ello, tienes que procurar ser amable y profesional con todo el mundo y potenciar los vínculos.
