La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado un informe de ‘preguntas y respuestas’ sobre las vacunas contra el coronavirus, en e que avisa de que, como la mayoría, las que se desarrollen contra el Covid-19 no van a ser «100 por cien efectivas», señalando a principios o mediados de 2021 como la fecha en la que podrían estar disponibles.
Actualmente se están estudiando muchas vacunas potenciales para el Covid-19 y, según el organismo, y varios ensayos clínicos pueden informar resultados a finales de este año. Si se demuestra que una vacuna es segura y eficaz, debe ser aprobada por los reguladores nacionales, fabricada con estándares exigentes y distribuida.
En este sentido, la OMS ha recordado que está trabajando con socios de todo el mundo para ayudar a coordinar los pasos clave en este proceso. Una vez que se disponga de una vacuna segura y eficaz, ha asegurado que trabajará para facilitar el acceso equitativo a los miles de millones de personas que la necesitarán.
Sin embargo, el organismo de Naciones Unidas ha reconocido que todavía no se sabe cuándo estará lista una vacuna «segura y eficaz» para poder ser distribuida si bien ha estimado que podría ser a principios o mediados de 2021. Ahora bien, ha puntualizado que para ello deben demostrar su seguridad y eficacia en ensayos clínicos grandes (fase III), y que, antes de que la OMS considere la precalificación de un producto de vacuna, se requiere una serie de revisiones independientes de la evidencia de eficacia y seguridad, incluida la revisión regulatoria y la aprobación en el país donde se fabrica la vacuna.
Del mismo modo, un panel externo de expertos convocado por la OMS, llamado SAGE, tendrá que analizar los resultados de los ensayos clínicos y, junto con la evidencia sobre la enfermedad, los grupos de edad afectados, los factores de riesgo de la enfermedad y otra información, recomendarán si las vacunas deben aplicarse y la forma de hacerlo.
«Las vacunas deben fabricarse en grandes cantidades, lo que será un desafío importante y sin precedentes, mientras se continúan produciendo todas las otras vacunas importantes que salvan vidas que ya están en uso. Como paso final, las vacunas se distribuirán a través de un complejo proceso logístico, con una rigurosa gestión de stock y control de temperatura», ha detallado la OMS.
Por todo ello, el organismo ha destacado la necesidad de no confiar en la vacuna el combate contra el coronavirus, insistiendo así en la importancia de garantizar las pruebas de detección del coronavirus, el rastreo de contactos, el distanciamiento físico y el uso de las mascarillas.
«El impacto de las vacunas Covid-19 en la pandemia dependerá de varios factores. Estos incluyen factores como la eficacia de las vacunas; la rapidez con que se aprueban, fabrican y entregan; y cuántas personas se vacunan», ha informado el organismo, para zanjar señalando que todavía no está claro cuántas dosis de vacuna se van a necesitar, aunque la mayoría de las que se están probando ahora utilizan regímenes de dos dosis.