El Real Madrid saltó al Borussia Park para medirse en la segunda jornada de la Champions League al Borussia Mönchengladbach, con mucha ilusión de hacer un buen papel; algo que se multiplicó luego de la victoria contra el FC Barcelona, por 1-3, en el Camp Nou. Sin embargo, el dominio y el buen juego que los merengues mostraron al principio del partido quedaron en nada por los dos goles del conjunto alemán.
Los blancos se quedaron helados y sin respuestas firmes para derrotar a un equipo muy bien armado. La derrota los dejaba en la agonía total, debido a lo complicado que era levantarse de dos caídas con dos jornadas disputas; pero la casta sobresalió para alumbrar en la oscuridad y darle un poco de esperanza al conjunto español que al final logró un empate (2-2). A pesar del punto, las cosas se ven muy mal para un Madrid que no termina de dar con la tecla; pero que después de este partido puede tener algunas cosas de la que agarrarse para afrontar lo que se viene.
2Casemiro empieza a entonarse
La garra y la fe del Real Madrid fue lo que levantó un resultado totalmente negativo en suelo alemán, pero este resultado dejó un protagonista claro que participó en los dos goles de los blancos. Casemiro se erigió como el héroe de los de Zidane al asistir a Benzema cuando más nadie lo creyó y marcar un gol con todo el peso de sus compañeros a sus espaldas, que sirvió para igualar las cosas y darle vida a los suyos.
Además de su participación en los goles, la actuación defensiva del brasileño ha ido creciendo y eso quedó más patente en este duelo de Champions League. Cierto que el Borussia marcó dos tantos, pero fueron más por desconcentraciones puntuales que por un fallo generalizado del equipo, tal como se venía dando en sus últimos resultados negativos. Casemiro es una pieza vital y que este acertado en su faceta defensiva, pero además pueda colaborar en ataque lo hacen más imprescindible.