Cómo hacer unas patatas fritas que no engorden

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Quien no haya comido patatas fritas en su vida seguro miente. Se trata de una de las entradas más populares de siempre que gustan desde los más niños hasta los más grandes. Las opciones están servidas en la mesa, tienes un catálogo diferente para elegir, bien sea desde unas crujientes y doradas con pizca de sal o acompañadas de tus salsas favoritas.

Ahora bien, sabemos que nos gusta y que si las comemos muy seguido entonces empezaremos a notar que vamos aumentado un poco de peso. Aquí el punto importante es saber si es posible preparar patatas fritas que no hagan engordar.

Tenemos una gran noticia para ti y es que sí hay maneras de lograr el objetivo. A continuación te mostraremos cómo lo puedes hacer posible de la forma más fácil.

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Muy bien, pasemos a explicarte el método para que las patatas no te engorden. Uno de los trucos mejor guardados es cocinarlas anteriormente en agua en su forma final, las comunes tiras o palitos. Solo cocínalas unos minutos, estas no deben hacerse completamente. Comprueba que su interior se reblandece con la ayuda de un cuchillo de punta fina y las retiras.

Procede ahora a escurrirlas muy bien para luego llevarlas al congelador. Una vez que son introducidas en el frigorífico debes colocarlas de forma separada y así estas puedan mantener el agua absorbida en el momento de freírlas.

Seguidamente, tienes que preparar un cazo con abundante aceite de oliva no refinada. Al estar bien caliente dicho aceite entonces puedes incorporar las patatas y freírlas por solo unos minutos. De esta forma podrás conseguir unas patatas bien crujientes en su exterior y un interior blando sin que este pueda absorber mucho aceite.