El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, ha condenado los actos violentos originados en la noche del martes en Pino Montano en protesta contra el estado de alarma, que se ha saldado, hasta el momento, con la identificación por parte de la Policía Local de dos de los integrantes de los grupos que provocaron esos desórdenes públicos.
Espadas ha criticado los disturbios «ocasionados por irresponsables», que «causaron no sólo daños al mobiliario urbano sino un ataque al ánimo en la sociedad, en unos momentos en los que debemos estar unidos por la situación de alarma de salud pública y cumplir con las recomendaciones sanitarias», ha afirmado.
El alcalde también ha expresado su deseo de «desligar» los actos violentos del barrio y de un segmento concreto, «ya que se trata de movimientos organizados, de características comunes, que hemos visto en otras ciudades de España». Espadas ha reconocido que las medidas, a veces, «son duras y difíciles de asimilar con ánimo», si bien se debe trasladar «unidad» frente al reto de mejorar los datos y bajar la cifra de contagios.
En cuanto a las investigaciones para esclarecer lo sucedido siguen abiertas y Policía Local y Subdelegación trabajan de forma coordinada en esa dirección.
Los incidentes se iniciaron sobre las 22,30 horas en la zona de Pino Montano donde grupos de jóvenes estaban incendiando contenedores y utilizando bengalas y cohetes, tras lo que se desplegó un dispositivo de Policía Local y Policía Nacional en la zona para controlar la situación.
Durante la protesta, que había sido convocada como pacífica por las redes sociales bajo el lema ‘El barrio lucha por su libertad’, varios participantes lanzaron objetos contra los autobuses y vehículos que circulaban por la calle Cortijo de las Casillas, lugar donde cruzaron e incendiaron algunos contenedores.