Vale que no es la receta más sana que puedas hacerte para comer. Pero, ya lo sabemos, la virtud está en el punto medio. Sin abusar, y muy de cuando en cuando, unas buenas alitas de pollo son una comida deliciosa ideal para compartir con la familia y los amigos. Eso sí, este no es un plato que se pueda improvisar de la noche a la mañana o sobre la marcha.
Las alitas de pollo requieren una previsión de al menos 24 horas para que todo el proceso se pueda seguir correctamente. No es que sea una receta difícil ni mucho menos. Cualquiera con un manejo básico de la cocina será capaz de preparar unas alitas de pollo. Vamos a ver cómo se hacen.
324 horas en reposo
En caso de que fuera preciso porque no cubre, puedes engordar un poco la marinada. Para ello, vete echando de forma proporcional más cantidad de los ingredientes. No obstante, hay que tener en cuenta que, durante el proceso de marinado, el pollo va a soltar líquidos que engordarán la mezcla. Es decir, que es importante calcular bien y no pasarse.
Cuando hayas tomado una decisión, tapa el recipiente con la mezcla y guárdalo en la nevera. Déjalo que reposa allí durante 24 horas.