La consellera de la Presidencia y portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha dicho este sábado que un nuevo confinamiento domiciliario implicaría «con mucha probabilidad» el cierre de las escuelas.
En una entrevista de Rac1 ha matizado que ese cierre «no es una decisión que esté tomada» y que deben ser las autoridades sanitarias las que recomienden al Govern si debe hacerse.
Preguntada precisamente por la posibilidad de decretar confinamientos domiciliarios, ha respondido que tanto médicos como epidemiólogos la ponen sobre la mesa, aunque «en estos momentos no están previstos de forma inmediata».
Explica que desde la Conselleria de Educación ya están recibiendo 300.000 ordenadores para garantizar que los alumnos que no disponen de herramientas tecnológicas puedan hacer un seguimiento telemático de la escolarización en caso de cierre de los colegios.
Pero ha pedido «corresponsabilidad» para reducir la interacción social, con el fin de garantizar que los alumnos puedan seguir yendo a la escuela.
TOQUE DE QUEDA
Según la consellera, todo apunta a que este domingo haya una reunión extraordinaria del Consejo de Ministros, aunque a ella le hubiera gustado que fuera este mismo sábado para decretar «de forma inmediata» el toque de queda, que probablemente se aplique de 23 a 6 horas.
Ha asegurado que «será un estado de alarma descentralizado» en el que la Generalitat será la autoridad delegada competente, lo que permitirá -en palabras de Budó- no tener que pedir autorización al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) para aplicar las decisiones del Govern.
Lamenta que, en ocasiones, «las autoridades sanitarias piden una medida, un juez decide otra cosa y al final no se aplica», y también ha afirmado que restringir la movilidad servirá además para proteger la economía.
LOCALES CERRADOS
En cuanto al cierre de bares, restaurantes y centros de estética, ha dicho: «A partir del lunes de la semana que viene, a partir de los datos epidemiológicos, veremos si podemos levantar o no las restricciones».
También ha dicho que el estado de salud del secretario de Salud Pública, Josep Maria Argimon, ingresado por coronavirus, «va mejorando.
MOCIÓN DE CENSURA DEL BARÇA
Sobre la posible moción de censura contra la junta directiva del Fútbol Club Barcelona, Budó dice que el Govern ha pedido «un protocolo que garantice que las votaciones se realizarán preservando las medidas higiénicas y de protección» y ha añadido que el club ha trabajado el protocolo con el Procicat.
«No hay ningún motivo de salud pública que no permita hacer estas votaciones» el próximo fin de semana, ha sostenido, pero la entidad es la que tiene que decidir si puede realizarla en esa fecha, ha añadido.