El IX Congreso Nacional de Farmacéuticos Comunitarios, que celebra la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (SEFAC), ha acogido una mesa de expertos sanitarios que ha analizado las lecciones que está dejando la gestión de la pandemia, así como el rol de los farmacéuticos comunitarios. Todos ellos han puesto de relieve que el papel de las farmacias durante la pandemia está «infrautilizado» y que «deberían aprovecharse estos recursos sanitarios».
El vicepresidente de SEFAC, Vicente J. Baixauli Fernández, ha subrayado que desde un primer instante desde la farmacia comunitaria se han sentido «poco reconocidos». «No hemos tenido ayuda ni reconocimiento expreso por parte de las autoridades sanitarias de lo que hacíamos y de lo que podíamos hacer: la farmacia ha dado la talla con lo que nos han dejado hacer», ha denunciado.
«Todavía se nos cuestiona por parte de otros colectivos. Nos da la impresión de que podíamos hacer mucho más y que se podría contar más con nosotros, pero por otras razones no es así. Esta sensación viene unida al hecho de que desde el inicio de la pandemia, como establecimiento esencial, hemos estado al pie del cañón, pero de alguna manera solo se nos ha puesto de actualidad por el precio de las mascarillas, siendo temas secundarios a nosotros», ha lamentado el vicepresidente de SEFAC.
Respecto a la gestión de la pandemia, ha subrayado que «los errores deben servir como una ayuda para mejorar en las decisiones». «Deberíamos ser exigentes a nuestros políticos y dirigentes sanitarios. A partir de ahora, se tiene más información y ya se tiene cierta experiencia en la crisis», ha agregado.
Mariano Esteban, jefe del Grupo de Poxvirus y Vacunas del Centro Nacional de Biotecnología (Centro Superior de Investigaciones Científicas), ha reivindicado, además, que el farmacéutico «tiene todos los conocimientos para hacer PCR». Tiene conocimientos en genética, bioquímica, biología molecular, etc. Está facultado para poder participar y ayudar al sistema de salud a conseguir mayor número de pruebas en la población y otras pruebas como vacunas, etc.», ha insistido.
Por su parte, el ex secretario general de Sanidad José Martínez Olmos ha reivindicado que la farmacia, al igual que otros colectivos esenciales, «ha estado al frente la pandemia». «La aportación ha sido extraordinaria. Los farmacéuticos son un recurso profesional que merece la pena tener la inteligencia de aprovecharlo», ha evidenciado.para saber cómo hay que controlar la epidemia», ha desgranado.
El presidente de la Sección de Farmacia de la Federación Farmacéutica Internacional (FIP), Lars-Ake Soderlund, ha subrayado que «una vez más se ha demostrado lo importante que es la farmacia comunitaria para la vida de los pacientes con la cadena de suministros de medicamentos tan importante para la salud de nuestros países.
«En general, creo que las farmacias han sido un recurso infrautilizado. Las farmacias podrían haberse empleado para obtener información de calidad garantizada sobre el virus. En este momento de incertidumbre, nuestra profesión ha demostrado su experiencia, su coraje y su dedicación. La farmacia nunca ha estado tan unida a nivel global hoy en día. Creo que ahora en España ha llegado el momento de desarrollar una estrategia nacional de salud en la que la farmacia sea un socio integrado», ha destacado.