Con la llegada del frío, la comida que más apetece es la calentita, esa que nos hacían nuestras madres y abuelas cuando éramos más jóvenes vivíamos en casa. Pero ahora hay que aprender a hacer ciertas cosas por uno mismo, y un huevo frito lo hace cualquiera pero, ¿y un cocido madrileño?
Esta es sin duda una de las mejores recetas que más gusta en toda España, y los que vienen de fuera y prueban la de calidad, saben apreciar lo buena que está. Y como hemos dicho, ya va siendo hora de que aprendas a hacerla por ti mismo. Y ya que estamos, como regalo te dejamos una receta más con la que te chuparás los dedos, unas croquetas de cocido.
3Continuación de la receta
Durante todo el proceso de cocción del cocido madrileño, tendremos el fuego al mínimo, sin variaciones. Cuando el agua rompa a hervir, añade los garbanzos que has tenido que lavar y escurrir primero. Cuando el agua vuelva a hervir, tardarán unas dos o tres horas en estar tiernos.
Aunque hay quienes cocinan algunos de los ingredientes por separado, queremos una verdadera receta tradicional, así que junto con los garbanzos, añade el medio repollo, o uno entero por la mitad si a tus comensales les gusta. Introduce también la morcilla, el chorizo y el tocino. Cuando el cocido esté casi listo, añade las patatas peladas y troceadas y las zanahorias, también peladas y troceadas. Este cocido tiene mucha grasa sí, pero no sabe duda de que está buenísimo, y al fin y al cabo, es mucho mejor que la grasa de hamburguesas y pizzas.