Imanol Arias es uno de los actores españoles que, pese a la profunda crisis que está viviendo el sector cinematográfico en nuestro país a causa de la pandemia del Covid, no ha dejado de trabajar en ningún momento. El próximo jueves, 22 de octubre, el protagonista de «Cuéntame» llega al Teatro Infanta Isabel de Madrid con «El coronel no tiene quien le escriba».
Expectante ante este regreso a las tablas, Imanol no tiene problemas en hablar del juicio pendiente en la Audiencia Nacional por el que le pide, por fraude fiscal, 27 años de cárcel y 10 millones de euros en concepto de multa. El actor asegura que «en mi carrera he tenido mucha suerte y algo de karma tendré que pagar. Ahora mismo la sensación que tengo es de que hay que esperar mucho, y esto es una larga espera. De lo que me pasa a mí no puedes hablar hasta que no sucede, porque no conviene, es confuso». Resignado, el leones cree que es «algo que me ha tocado a mi. Esto lo tomo como algo que tengo que vivir».
Arias, muy tranquilo, defiende su inocencia y la de Ana Duato y deja claro que no es algo que le haya pasado sólo a ellos. «Mi caso no es único, hay un 85% de los actores y actrices que han pasado por la televisión que tienen el mismo problema, solo que unos con 20 años el problema es cinco y otros con tres años el problema es 0,50. pero el problema es el mismo. seguramente algún día alguien dirá ‘qué curioso, pasó aquello'», ha asegurado el leonés.
Tan claro y crítico como nos tiene acostumbrados, Imanol confiesa que no ha echado de menos el apoyo gubernamental en esta crisis a causa de la pandemia del Covid porque «eso ya es desde hace mucho tiempo algo que no se espera». «La profesión no tiene quien le escriba desde allí, no llegan cartas desde el Ministerio», ha bromeado, jugando con el título de su obra. «Lo único que le queda a la profesión es cuidarse y tener amor profundo a la vida y la propia profesión. Lo importante es que nosotros mismos y los espectadores lleguemos a un acuerdo de supervivencia y honestidad», ha indicado, mostrando la cara más dura de la crisis de su sector.
Por último, y parafraseando a Gabriel García Márquez, autor de «El coronel no tiene quien le escriba», el intérprete reivindica la importancia de las personas mayores en la sociedad actual: «No olvidéis los sueños de los mayores». «En el final de la vida, parece que ellos tienen un conocimiento que con eso les basta y con dejarles una pensioncita ya está. Y no aprendemos. Quizás a los mayores, más que darles cuidados, es pararte a escuchar y decir ‘saben más, nos pueden enseñar algo’. Esta crisis los ha arrinconado, se han muerto muchos», afirma, alzando la voz para defender una importancia de nuestros mayores que no siempre sabemos darles.