Los dueños del perro de raza peligrosa que atacó a la vicealcaldesa de València, Sandra Gómez (PSPV), en diciembre de 2018 en la playa de la Patacona, han reconocido ante el juez que el can iba sin bozal, que se lanzó sobre el perro de la política, aunque no admiten las lesiones que ella alega.
La edil, por su parte, quien también ha declarado en el juzgado, ha mantenido la imprudencia de los acusados y la lesión que sufrió, de la que tuvo que ser operada y constan diferentes informes médicos.
Este lunes se ha celebrado en el Juzgado de lo Penal número 12 de València la vista contra los dos dueños del perro –un American Staffordshire Terrier potencialmente peligroso que iba con chip pero sin bozal, sin atar y sin licencia (caducada)– que atacó a Gómez y, como consecuencia, le provocó heridas en una mano que precisaron una intervención quirúrgica.
La vicealcaldesa pide para los acusados medio año de prisión por un delito de lesiones por imprudencia grave y una indemnización de unos 9.000 euros, según su escrito de acusación provisional.
Por su parte, la Fiscalía no acusa a los dueños del perro al no poder tipificar los daños como imprudencia menos grave –tras la última reforma del Código Penal–, aunque deja abierta la vía civil.
Los hechos ocurrieron en diciembre de 2018 cuando un hombre paseaba el perro de su pareja, un American Staffordshire Terrier, y una hembra American Bully por la playa de la Malvarrosa cuando vio al Golden de la vicealcaldesa, que corría junto a ella, suelto por la playa.
En un momento determinado y, tras estar olisqueándose, el animal de los acusados agredió al can de Gómez, que se interpuso para evitar el ataque y fue mordida en el quinto dedo de una mano, lo que le provocó una fractura abierta.
Como consecuencia, la edil se tuvo que someter a una operación por las heridas que presentaba en una mano y precisó 126 días para curarse. La agresión acabó en denuncia y recayó en el Juzgado de Instrucción número 3 de València.
Hasta el lugar de los hechos se desplazaron agentes de la Policía Local que fueron los que trasladaron a la edil al hospital para ser atendida e interpusieron denuncia de oficio por la agresión. El can de la vicealcaldesa también sufrió lesiones en el cuello y, tras ello, debió de someterse a revisiones y curas.