La carrera por convertirse en el mejor tenista de la historia continúa más vigente que nunca. Roger Federer, Rafael Nadal y Novak Djokovic siguen inmersos en una lucha que sigue siendo épica, porque los tres ganan y ganan títulos en cada campaña, lo que los hace acumular más méritos para colocarse en lo más alto de la historia. En los últimos días el que ha dado un paso gigante en esta particular batalla ha sido el español, gracias al Roland Garros número 13 que cosechó. No solo representa un hito impresionante el ganar 13 veces el torneo parisino, que lo catapulta (más aún) como el mejor tenista sobre la arcilla que haya existido; sino que también significó alcanzar al suizo en esos 20 Grand Slam que ahora tienen ambos.
Para Nadal, los récords vienen en consecuencia a sus grandes actuaciones en los torneos importantes en los que decide participar. En su mente no está esa obsesión por forzarse a competir en cada evento, con lo que podría lesionarse; más bien prefiere reunir fuerzas y pelear por los trofeos más trascendentales. Sin embargo, al mallorquín todavía se le escapan algunos registros, que de lograrlos, lo llevarían a lo más alto en su carrera con los otros tres. Su calendario siempre es el que dicta sentencia, pero con algunos títulos ausentes en su vitrina podría adaptarlo para conseguirlos y acumular más méritos en esa lucha de pulso que tiene con Federer y Djokovic.
2Esos tres Masters 1000 que se le resisten
Si la cuenta de lo que le falta en torneos ATP 500 es extensa, la de Masters 1000 es un poco más corta; pero con el agravante de que estos si son torneos vitales para Nadal. El español trata de no perderse ninguno de estos eventos, aunque estén muy apretados en el calendario; no obstante, aquí si hay un deseo por obtenerlos todos, más al ver que el único que ha conseguido tal hazaña es Djokovic. A Nadal aún se le escapan tres de los nueve Masters 1000: Miami, en el que ha perdido hasta cinco finales, en las que la humedad de Florida lo afecta mucho; Shangai, que ha sido una piedra en su zapato y en la que solo ha podido llegar a dos finales; y el de París, que ha diferencia del Grand Slam, siempre llega cansado a esas alturas del año y solo jugó una final.