La pandemia de coronavirus es, hasta ahora, la mayor crisis sanitaria de los últimos 100 años. En muchos países ha provocado una crisis económica y al parecer su meta es adentrarse mucho más en la crisis climática. El uso obligatorio de mascarillas, indispensable para protegernos del virus, ha conseguido que el consumo de plástico sea casi inevitable, por lo que hemos descuidado aún más el planeta que habitamos. Desde máscaras faciales y guantes, hasta protectores corporales, lo hemos ido empeorando sin darnos cuenta.
En este artículo te contamos por qué deberías cortar las gomas a las mascarillas antes de tirarlas a la basura.
3Guantes contaminantes
Los guantes también son peligrosos para los animales, pues sus colores brillantes pueden ser confundidos con comida por aves, tortugas y otros mamíferos marinos, poniéndolos en riesgo de sufrir lesiones graves.
Desde el inicio de la pandemia, en las redes sociales muchas personas han publicado imágenes de guantes de látex brillantes y mascarillas arrugadas que ensucian calles, carritos de compras, estacionamientos, playas y espacios verdes.
Pero lo más preocupante es que no solo existe un riesgo potencial para la salud el hecho de dejar caer mascarillas y guantes usados, sino que muchos contienen materiales que no se reciclan y no son biodegradables. Por ejemplo, las mascarillas quirúrgicas se fabrican con telas no tejidas que incluyen plásticos como el polipropileno.