Torrent comunicará el 21 de octubre, sin candidatos, que se activa el reloj de las elecciones

El presidente del Parlament, Roger Torrent, ha anunciado este viernes que comunicará el miércoles 21 de octubre en el pleno de la Cámara catalana que no hay un candidato a la investidura para sustituir al expresidente Quim Torra, por lo que se activará el reloj de las elecciones, que se celebrarían el 14 de febrero.

Lo ha dicho en rueda de prensa después de que el jueves finalizara el plazo de 10 días hábiles para consultar a los grupos si hay algún candidato a la investidura: «En el marco de esta ronda he constatado la imposibilidad de celebrar un pleno de investidura porque no se ha presentado ningún candidato».

Ha explicado que la comunicación, que equivaldrá a una investidura fallida, la hará el miércoles en el pleno ordinario que ya está previsto y ese mismo día publicará una resolución en el Boletín Oficial del Parlament (Bopc).

El miércoles, antes de la sesión de control al Govern, Torrent leerá la resolución que notifica que no hay candidato a la investidura y que comienzan a correr los plazos establecidos por la Ley de Presidencia, que será la misma resolución que se publicará en el Bopc durante ese día, y después se abrirá un turno de intervenciones para que los grupos se posicionen al respecto.

El presidente del Parlament ha sostenido que tenía dos opciones para hacer este acto equivalente a una investidura fallida, publicar una resolución en el Bopc o notificarlo en el pleno, y ha optado por hacer ambas.

A partir de ahí, el jueves 22 de octubre se abrirá el periodo de dos meses para investir a un presidente y, si esto no se produce como es previsible, el 22 de diciembre el Parlament quedará disuelto de manera automática y el Govern publicará el decreto de la convocatoria de elecciones, que serán el domingo 14 de febrero.

Torrent ha destacado que se trata de una «situación inédita» porque nunca se había inhabilitado a un presidente de la Generalitat en el cargo, pero ha reconocido que los grupos lo han puesto fácil y han estado en contacto durante todo el procedimiento.

En el caso de que en estos dos meses algún grupo plantee un candidato a la investidura, el presidente de la Cámara catalana tendrá que «abrir un periodo de consultas para ver si hay posibilidades de que el candidato pueda ser investido», aunque de momento ninguna formación ha expresado su voluntad de hacerlo.

ACTIVIDAD PARLAMENTARIA

Torrent ha subrayado que durante el plazo de dos meses, que se abrirá el 22 de octubre hasta el 22 de diciembre, el Parlament mantendrá su actividad «normalizada» y celebrará los plenos que ya hay previstos, siempre respetando las limitaciones y restricciones por la pandemia.

Así, a no ser que la Junta de Portavoces modifique el calendario, el último pleno de la legislatura será el que está previsto para los días 15, 16 y 17 de diciembre.

Desde la disolución automática del Parlament, la actividad parlamentaria quedará limitada a la Diputación Permanente -el órgano encargado del funcionamiento de la Cámara cuando el pleno está disuelto y los diputados no se pueden reunir-, que se encargará de validar o derogar los decretos que haga el Govern en funciones sobre la pandemia, si se da el caso.

Preguntado por si ve peligrar la fecha del 14 de febrero de las elecciones por la evolución del coronavirus, Torrent ha insistido en que, desde el momento en que la Cámara está disuelta y el Govern ha publicado la convocatoria de los comicios, será potestad del Ejecutivo valorar la situación sanitaria y «ponderar los dos derechos que están en juego: el derecho fundamental del voto de los ciudadanos y el derecho a la seguridad sanitaria».