El delegado del Gobierno andaluz en Granada, Pablo García, ha incidido este martes en que la capital está en un «momento crítico» a tenor del «altísimo ritmo de contagios entre la población joven» y ha defendido las medidas extraordinarias activadas para limitar el movimiento de este colectivo, tanto en su asistencia a las clases universitarias como en las salidas nocturnas a lugares de ocio, «donde se ha demostrado un notable relajamiento de la prevención».
Con ello, según ha enfatizado, se busca «evitar otras de mayor calado, como el cierre de locales o la limitación de horarios, en un sector ya de por sí muy dañado».
El delegado ha señalado en una nota que los datos epidemiológicos revelan una altísima incidencia de la Covid-19 en el grupo de edad comprendido entre los 19 y los 35 años, que ha llegado a suponer el 80 por ciento de los contagios en Granada y gran parte de esos positivos coinciden con estudiantes universitarios.
Desde la Junta afirman que no pretenden «estigmatizar en ningún caso a este grupo de población», pero ven «un ejercicio de responsabilidad saber detectar en cada momento cuáles son los puntos débiles donde este virus está teniendo más incidencia».
Ha precisado que las medidas adoptadas «en ningún caso obligan a la suspensión de la actividad docente pero sí que pretenden reducir al máximo las situaciones de riesgo» detectadas en este grupo de población. Y es que la Junta también ha confirmado en los últimos días decenas de denuncias por reuniones improcedentes en pisos de estudiantes, fiestas con elevado número de participantes y presencia en locales de población juvenil sin adoptar las medidas de protección, como el distanciamiento social o el uso de mascarilla.
El delegado ha incidido en que todo caso se trata de medidas de carácter temporal, «a la altura de la gravedad de la situación» y ha hecho un llamamiento a la unidad y a la colaboración, no sólo de los jóvenes, sino de todas las instituciones de la provincia.
