Indeseables los hay muchos y de muchas clases. Y, por desgracia, buena parte de ellos tienen imaginación e inteligencia para urdir sus planes. Por eso hay que andarse siempre al loro para todo, siempre con la mosca detrás de la oreja. Muy especialmente en Internet, donde no vemos ni conocemos a la gente con la que tratamos. Y si hablamos de dinero, de cuentas corrientes o de ofertas de trabajo, ninguna precaución es suficiente.
Parece mentira que haya gente capaz de hacerlo, pero así es. Ofertas de trabajo falsas, hechas para que la gente pique y, tal vez, para acceder a información sensible sobre ella que les permite robarles o suplantar su identidad.
Aquí te van una serie de claves a tener en cuenta para asegurarte de que no te la están intentando colar con una oferta de trabajo.
5Cuidado con los archivos y los enlaces
Puede ser que te llegue un mail con la “oferta de trabajo que no puedes dejar escapar y que debes aceptar”. Ese lenguaje tan tremendo y grandilocuente ya es de por sí sospechoso. Pero, recuerdo, los estafadores saben buscarnos las cosquillas. Y si hacen las cosas de una forma y no de otra, es por algo.
Primero tientan tu vanidad con esas “ofertas que no puedes dejar escapar”. Y en ese mismo correo electrónico te adjuntan un archivo o un enlace extraño en el que te detallan las condiciones del trabajo. Cuidado con eso, que apesta a timo desde la China. Las empresas “de verdad” no acostumbran a hacer este tipo de cosas. Así que estáte en guardia.