Las leches vegetales hoy en día están poniéndose más de moda. Esto es debido, primero a que cada vez hay más intolerantes a la lactosa. También hay mucha gente que, aunque no es intolerante, no digiere del todo bien este líquido y prefiere optar por bebidas más ligeras. La leche de avena es una de las distintas opciones que hay en el mercado. Además, incluye muchísimos beneficios para nuestra salud.
Esta leche de avena es ideal para veganos y vegetarianos porque está hecha a partir de agua y granos del cereal. También viene muy bien para dietas adelgazantes en donde quieras menos grasa, pero no dejar de beber leche. Este producto tiene gran contenido en fibra y además ayuda a controlar los niveles de colesterol en la sangre. Es más digestiva que la leche normal y rica en vitamina B. Contiene un gran porcentaje de proteínas y carbohidratos de absorción lenta. Y, por si fuera poco, se puede hacer en casa de una forma sencilla.
2Paso 1 de la leche de avena
En un recipiente con agua vamos a colocar los granos de avena. Deberán estar reposando durante unas doce horas, así que lo mejor es dejarlos durante toda la noche al remojo. Esta agua luego será desechada.
Con los granos en remojo vamos a hacer que cojan humedad y se ablanden para que puedan ser triturados sin ningún problema por la batidora o cualquier otro electrodoméstico pequeño que triture.
Si queremos que la bebida quede más espesa, dejaremos los granos durante las 12 horas en remojo. Si queremos una bebida más líquida, podemos dejarlos menos horas en el agua. Ya depende de nuestro gusto.