Adama Traoré, una de las nuevas estrellas en ascenso del balompié español, se ha convertido en uno de los jugadores más deseados y cotizados del momento gracias a sus excelentes actuaciones con el Wolverhampton Wanderers FC de la Premier League de Inglaterra.
Este chico que nació en Hospitalet de Llobregat proviene de padres malienses, quienes lo apoyaron en cada paso que él dio por el bien de su carrera deportiva. Desde pequeño, su amor y pasión por el fútbol se notaba de gran forma y es que Adama Traoré siempre jugaba en la calle con los que todavía son sus amigos y soñaba con lograr grandes cosas con su país, tal y como sucedió en su debut ante la selección de Portugal, algo que seguramente él había querido vivir desde hace mucho tiempo.
El extremo derecho ha deslumbrado a los cinco continentes gracias a su increíble velocidad, su majestuosa potencia y su venenoso y peligroso regate. Además, Adama Traoré ha sido catalogado por todos los expertos de esta disciplina como una bala por la banda que fácilmente puede superar y dejar atrás a cualquier rival que intente seguirle los pasos. Sin embargo, su éxito no proviene de la suerte y, es por ello, que les hablaremos de los inicios, ascensos y glorias de esta promesa española.
1Los primeros pasos de Adama Traoré
Adama Traoré dio sus primeros pasos en el mundo del fútbol en la cantera del R. C. D. Espanyol, en el que solamente tuvo un breve paso, para después irse con tan solo 8 años a La Masía del Fútbol Club Barcelona, específicamente en el año 2004, lugar en el que siempre jugó en categorías más altas a las que le correspondían.
Su talento, habilidad, inteligencia y ganas de lograr grandes cosas lo llevaron a ser una de las promesas más interesantes de la cantera del combinado blaugrana y eso se demostró cuando en el año 2013 lo promovieron del Juvenil «A» hacia el FC Barcelona «B».
Tras dos excelentes temporadas de Adama Traoré con el Juvenil «A», Eusebio Sacristán pidió que el chico se uniera a las filas de su equipo, con el que realizó su debut durante la derrota ante el S. D. Ponferradina, escuadra con la que dejó grandes sensaciones y con la que comenzó a demostrar de qué estaba hecho.