Los pacientes hospitalizados con COVID-19 tenían más probabilidades de ser hombres, más jóvenes y, tanto en Estados Unidos como en España, tenían menos comorbilidades y un menor uso de medicamentos que los pacientes hospitalizados con gripe, según un estudio publicado por la comunidad de Ciencias e Informática de Datos de Salud Observacionales (OHDSI), que ha establecido una red internacional de investigadores y bases de datos de observación de la salud con un centro de coordinación central ubicado en el Departamento de Informática Biomédica de la Universidad de Columbia (Estados Unidos).
Este estudio de la red mundial, en el que participaron más de 34.000 pacientes de COVID-19 de tres continentes, tiene por objeto proporcionar mayores detalles sobre las características de los pacientes que padecen la enfermedad, y también ayudar a informar la toma de decisiones en torno a la atención de los pacientes hospitalizados.
Los pacientes hospitalizados con COVID-19 eran más típicamente hombres en EEUU y España, pero más a menudo mujeres en Corea del Sur. Las edades de los pacientes variaban, pero en España y EEUU, los grupos de edad más comunes estaban entre 60 y 75 años. Los pacientes hospitalizados con gripe eran típicamente mayores que los hospitalizados con COVID-19, y era más probable que fueran mujeres.
Se observó que muchos de los pacientes hospitalizados con COVID-19 tenían otros problemas de salud. Por ejemplo, la prevalencia de los trastornos hipertensivos oscilaba entre el 24 y el 70 por ciento, la diabetes entre el 13 y el 43 por ciento, y el asma entre el 4 y el 15 por ciento, según las fuentes de datos.
Sin embargo, a pesar de ello, en comparación con los pacientes hospitalizados por la gripe en los últimos años, se observó que los pacientes con COVID-19 eran en general más sanos. La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), las enfermedades cardiovasculares y la demencia eran más comunes entre los pacientes hospitalizados con gripe que entre los hospitalizados con COVID-19.
«Este estudio nos ha permitido comprender mejor los perfiles de los pacientes hospitalizados con COVID-19. A pesar del reciente discurso sobre la supuesta mala salud y la limitada esperanza de vida de los pacientes con COVID-19, vemos que los pacientes con COVID-19 no tienen peor salud que los típicamente hospitalizados con gripe. Esto resalta aún más la alta tasa de mortalidad entre los pacientes de COVID-19», explica el co-autor principal, Edward Burn.