La Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, por sus siglas en inglés) ha elaborado, junto al Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) y el laboratorio de referencia de la Unión Europea para la gripe aviar, un informe en el que se pide a los países de la Unión Europea intensificar la vigilancia y bioseguridad para prevenir «posibles nuevos brotes» de gripe aviar este año.
Esta petición se produce después de los detectados en los últimos meses en aves silvestres y domésticas en el oeste de Rusia y Kazajistán, conocida ruta migratoria de otoño de las aves acuáticas silvestres que se dirigen a Europa.
Aunque el riesgo de transmisión de los virus de la gripe aviar al público en general en Europa sigue siendo «muy bajo», el organismo ha recomendado a la población no tocar aves muertas sin llevar un equipo de protección adecuado, y ha informado de que es «probable» que las zonas septentrionales y orientales de Europa sean las «más vulnerables» a los nuevos brotes.
Y es que, tal y como se recuerda en el trabajo, cuando en los veranos de 2005 y 2016 se detectó un brote del virus de influenza aviar altamente patógena (IAAP, por sus siglas en inglés) en la misma zona de Rusia, se produjeron seguidamente epidemias en Europa septentrional y oriental.
«Si el patrón se repite este año, se espera que la enfermedad llegue a las mismas zonas de Europa en otoño o invierno y también es posible que se propague a continuación a países del sur y el oeste de Europa», han avisado los organismos en el informe, el cual se ha incluido en la última actualización sobre la gripe aviar en Europa y fuera del continente.
Por todo ello, en el trabajo se aconseja a los países europeos tomar medidas para detectar rápidamente los casos sospechosos de IAAP y aumentar la bioseguridad en las granjas avícolas; avisar a las autoridades veterinarias y sanitarias responsables de la fauna silvestre sobre el probable riesgo de aparición de la IAAP, e instarlas a que observen y analicen con celeridad las aves silvestres muertas o enfermas.