El índice glucémico (IG) es un sistema que nos ayuda a clasificar los alimentos por su respuesta glucémica, algo determinante para llevar una vida sana y poder seguir con éxito dietas de adelgazamiento. Es decir, el índice glucémico permitirá saber la respuesta glucémica de un alimento que contiene la misma cantidad de carbohidratos que un alimento de referencia.
En otras palabras, este término se usa para medir la rapidez con la que los hidratos de carbono de un alimento pasan a la sangre en forma de glucosa tras ser digeridos. Cuanto más rápido se realice este proceso, más pronunciados serán los picos de azúcar en sangre.
5Otras cosas menos obvias pero que influyen mucho en el IG
El tipo de azúcar. No todos los azúcares tienen un IG alto. Por ejemplo, la fructosa (azúcar de la fruta) tiene 19 y la maltosa (presente en muchos productos procesados) tiene 105.
Cómo de molido o procesado está el alimento. Por ejemplo, cuanto más finamente molido está un grano, más rápidamente se digiere y más alto es su IG.
El tiempo de cocinado. Cuanto más tiempo cocines la pasta o cualquier otro alimento rico en hidratos de carbono, más rapidamente digieres sus azúcares y más aumenta su IG.
La madurez. Cuanto más madura la fruta, más alto es su IG. Como ejemplo, un plátano verde tiene un IG de 30 y uno maduro tiene un IG de 48.
Las verduras y la fruta peladas presentan un IG más elevado que si son consumidas con piel; al pelar los alimentos, perdemos buena parte de la fibra, lo cual induce un aumento del IG.