Comenzamos este artículo diciendo algo que por obvio, quizás muchas veces pasamos por alto y es que hay que hacer un uso racional y controlado de cualquier medicamento ya que estos siempre tienen efectos secundarios. Además, no debemos automedicarnos, debemos seguir las instrucciones de nuestro médico o farmacéutico. La aspirina y el paracetamol son dos de los analgésicos, junto con el ibuprofeno, más tomados a día de hoy a lo largo de la geografía mundial.
En España podemos comprar ambos sin receta en la farmacia. Son paliativos para el dolor de cabeza, los dolores menstruales, los dolores musculares y los estados febriles leves, entre otros.
6Cómo actúa la aspirina
La aspirina es un agente antiplaquetario, lo que significa que impide que las células sanguíneas llamadas plaquetas se adhieran a otras y formen coágulos. Por eso se indica para los pacientes que se están restableciendo de haber sufrido un ataque cardíaco. evitando así que se formen coágulos sanguíneos en las arterias coronarias. La aspirina también reduce las sustancias del organismo que causan dolor e inflamación.
La cantidad de aspirina que se puede tomar, varía en función de los tipos y de las patologías. Debemos atender siempre a los criterios que nos indique nuestro médico o farmacéutico.