La presidenta de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), Cani Fernández, ha asegurado que ve «con preocupación» la tendencia que se está registrando a reclamar la creación de empresas que constituyan «campeones nacionales» en diferentes sectores y ha advertido de que esto puede generar situaciones de «distorsión» en el mercado.
«Todo lo que sea enturbiar o distorsionar el libre juego de la competencia tiene inconvenientes claros», ha advertido Fernández durante su intervención en un encuentro organizado por el Consejo General de Economistas de España.
Fernández ha señalado que es verdad que la competencia «no lo es todo» y que pueden existir situaciones de crisis «muy profundas», como lo que se ha vivido con el Covid-19, en la que se integren otros elementos de interés general dentro de la normativa de competencia «estableciendo los límite de proporcionalidad necesarios».
Sin embargo, ha advertido de que cualquier subsidio o ayuda que haga que las empresas no generen su propio músculo competitivo «a la larga va a plantear problemas de distorsión en el mercado, por lo que ve «con preocupación» esta tendencia a reclamar la creación de «campeones nacionales», que además se ha incrementado «muchísimo» con la crisis generada por la pandemia.
A este respecto, ha añadido que estas corrientes también defienden una mayor intervención pública en los distintos sectores de la economía e integrar en el análisis de competencia otros elementos como la sostenibilidad. «Por muy loables y necesarios que sean estos objetivos para la sociedad en su conjunto se desvían un poco del propio análisis de la competencia», ha incidido.
Por este motivo, ha instado a recurrir a otros instrumentos para lograrlos y evitar desvirtuar y forzar los límites del derecho de la competencia, ya que si se desvía mucho de su tarea puede acabar generando un espacio de ‘soft law’ en el que todo quepa.
La presidenta de la CNMC ha incidido en que la competencia es «uno de los pilares» del mercado único europeo y que tiene unos «cimientos fuertes», por lo que ha remarcado que, aunque puede haber otros pilares que vayan en ayuda de una mayor política industrial o una mejor política de medionambiente, no se debería distorsionar el de la competencia y seguir siendo fieles a los mandamientos actuales.
AUMENTO DE CONCENTRACIONES
Por otro lado, Fernández ha indicado que en la CNMC esperan que se incremente «notablemente» en el cuarto trimestre de 2020 el número de operaciones de concentración a analizar tras el parón que supuso para la economía la declaración del Estado de alarma para frenar la expansión del Covid-19.
En este sentido, ha explicado que la CNMC evalúa al año entre 80 y 100 operaciones de concentración, pero en 2020 están actualmente en torno a 40, de las que doce se notificaron durante el Estado de alarma a pasar de la suspensión de los plazos administrativos.
A este respecto, la presidenta de la CNMC ha asegurado que son «muy conscientes» del la necesidad de actuar con rapidez a la hora de analizar estas operaciones, especialmente en entorno actual en el que pueden ser claves para el futuro de las compañías.
En esta línea, ha añadido que el 95% de las operaciones suelen ser aprobadas con rapidez, como refleja el hecho de que 37 de las 38 notificadas este año han sido aprobadas sin condiciones, pero también ha incidido en que hay otras en las que es necesarios analizar «a fondo».
AUMENTAR LA VISTAS
Por otro lado, Fernández ha señalado que uno de sus objetivos para su mandato como presidenta de la CNMC es incrementar las vistas ante el consejo de los expedientes más importantes y complejos que aborde, pero para ello ha incidido en que es necesario ampliar el plazo de los mismos, ya que los 18 meses actuales es «un poco corto».
En este sentido, ha incidido en que incluir la celebración de vistas en los casos más complejos ayudaría a instruir y tramitar mejor los expedientes, lo que a su vez generaría resoluciones más cortas de los tribunales judiciales, pero ha remarcado que su preparación requiere «mucho tiempo y una fuerte inversión de trabajo.
Asimismo, Fernández también ha propuesto que se amplíe el importe de las sanciones a los directivos hasta los 400.000 euros, como ocurre en las impuestas por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), dado el impacto disuasorio que se ha demostrado que tienen estas sanciones.
Por otro lado, también ha asegurado que en la CNMC no se plantean modificar el criterio de cuota de mercado como requisito para su visto bueno a una operación, que ha sido criticado en algunas ocasiones desde el ámbito internacional, dada la enorme utilidad en campos como el mercado digital, donde la facturación no da una imagen real del mismo.