Es muy difícil que alguien pueda resistirse a una tapa de croquetas de jamón. Son uno de los grandes clásicos de nuestros bares, aptos para todo tipo de paladares. Las croquetas tienen hasta un día propio, el 16 de enero es el Día Internacional de la Croqueta que es considerada como uno de los grandes manjares de nuestra gastronomía.
6Cómo se elaboran las croquetas de jamón
Comenzamos poniendo la leche en una olla, con el hueso de jamón y un poco de pimienta a fuego medio. Cuando la leche esté caliente, bajamos la temperatura al mínimo y dejamos que el hueso de jamón infusione un tiempo que puede oscilar entre media hora y 40 minutos. Tras este tiempo colamos la leche y le añadimos la nuez moscada.
En una olla aparte, calentamos la mantequilla a fuego suave para que se derrita y le añadimos la cebolla picada muy fina. Una vez que la cebolla haya adquirido la típica textura transparente, incorporamos el jamón y lo salteamos. Posteriormente, añadimos la harina y la cocemos durante unos minutos, revolviendo sin parar. Se trata de que la harina se tueste, pero teniendo mucho cuidado de que no llegue a quemarse.
El siguiente paso es incorporar la leche caliente y revolver para asegurarnos de que no queden grumos hasta que la bechamel se vaya espesando. Una vez que tengamos la bechamel lista, la dejamos enfriar en una fuente. Para elaborar las croquetas la bechamel tiene que estar fría, de hecho, hay quien la deja reposar en en el frigorífico de un día para otro.