Cuando ocurre una ruptura entre la pareja, se experimentan diferentes tipos de sentimientos, los cuales algunas veces se vuelven obsesivos.
Estos sentimientos fluctúan de momentos de ira, hasta depresión. Algunas veces las personas envueltas en la ruptura atraviesan por etapas de desesperación, tristeza, deseo de volver y melancolía.
Así como el amor cuando nace en la pareja es algo mágico, cuando desaparece se puede convertir en el peor de los infiernos, que puede prolongarse por muchos meses y en algunos casos extremos el sufrimiento puede extenderse a años.
Iniciar una separación es sumamente angustiante, además del dolor e incertidumbre que produce la ruptura, es aún más angustiante cuando hay hijos de por medio.
2¿No sabes cómo reaccionar cuando termina una relación?
Eso es una actitud completamente común. Pero es importante que reflexiones y te detengas.
Aunque se sabe que la mayoría de las rupturas duelen muchísimo, hay las que desgarran el alma, y en consulta, los especialistas viven de cerca ese dolor que experimentan sus pacientes.
Probablemente durante este proceso no mueras de amor literalmente, pero si puedes experimentar que ataques depresivos, pierdes cosas, desaprovechas oportunidades, te enfermas, viene la ansiedad, el insomnio, la falta de ganas de vivir, pierdes el apetito, y la lista es larga, en resumen sienten que es el fin.
Lo bueno de todo esto es que con ayuda terapéutica es probable que lo anterior sea menos doloroso y llevadero para quien lo vive.