Durante los últimos días las noticias en el FC Barcelona han girado en torno a la figura de Ousmane Dembélé. El francés ha sido el centro de atención debido a que se esta barajando muy seriamente su salida de la entidad catalana para poder recolectar el dinero suficiente y así ir a por Memphis Depay con todo.
A pesar de que el menos interesado en salir es el mismo Dembélé, esta puede ser una buena oportunidad para levantar su carrera en una liga tan competitiva como lo es la Premier League, porque es el Manchester United el que está tras su pista. Este posible adiós llega debido a que, después de tres años en el Barça, su estancia allí solo puede catalogarse como un fracaso rotundo. La indisciplina, la falta de hábitos de un buen profesional y, sobre todo, las lesiones han tirado lo que pudo ser un gran fichaje de los blaugranas.
4Las lesiones condenaron su gran talento
Los problemas de Dembélé en el conjunto catalán responden a muchos factores; pero su indisciplina y su falta de profesionalidad, son dos de los más importantes. Sin embargo, el mayor inconveniente del francés no ha sido otra cosa que las lesiones. En total, ocho lesiones musculares lo han tenido alejado de los terrenos de juego más de 12 meses; eso sumado a sus suplencias y a molestias menores, lo han tenido más tiempo fuera de de las canchas que jugando para el Barça en estos tres años. Ese tipo veloz, descarado y certero; capaz de pegarle igual de bien con la zurda que con la derecha y con el don de asistir casi siempre a sus compañeros, se perdió en un mar de lesiones que lo dejaron con el mote de «frágil».