A día de hoy, la tecnología forma una parte demasiado importante en nuestras vidas. En Internet guardamos una gran cantidad de datos de suma importancia, y la mayoría de ellos están asociados a tu cuenta de Gmail. Perderla supondría un riesgo realmente grave, ya que a partir de aquí podrían infiltrarse no solo en tu vida privada, sino hacerse con datos de toda clase, incluso relacionados con tu banco.
Los hackers no deberían ser tu preocupación, pero sí los crackers, personas que aprovechan su talento simplemente para perjudicar a otras. Pero ellos no son los únicos, ya que hay más personas de las que desconfiar a tu alrededor. Es por ello que hoy te vamos a mostrar la mejor forma de poner todos tus datos a salvo.
1No compartas tu contraseña
Empezaremos con lo más obvio, nunca compartas con nadie la contraseña de tu Gmail. ¿La razón?, no podemos confiar ni en nuestra sombra. Y si no que se lo digan a la niña que decía que Zara se pronunciaba «sera», con voz repelente y «pronunciación» inglesa. Ella le dijo su contraseña a alguien que creía de confianza, y se quedó sin cuenta de Instagram. Pues imagina que te pasa esto mismo con tu cuenta de Gmail.
De robarte tu cuenta, no solo tendría acceso tus correos, también a otras plataformas. Bastaría con escribir el correo y marcas la opción «He olvidado mi contraseña» para que esta se envíe a tu Gmail, y la pierdas igualmente. Por lo tanto, ni siquiera a tu pareja, jamás compartas tu contraseña con nadie, ya que las consecuencias pueden llegar a ser graves.