Desde pequeños, en nuestras casas nos han obligado a comernos todo lo que había en el plato, con la frase de «cómetelo todo que hay niños que pasan hambre«. Tú, joven e inocente, no entendías en qué podía ayudar a esos niños que tú te lo comieras todo. Las sobras de comida tienen un destino fatal, la basura, y la culpa es solo nuestra.
Aunque no lo creas, esto tiene más consecuencias de las que parece. A continuación, te vamos a explicar por qué deberías cambiar tu día a día con respecto a la comida. Es más, no volverás a dejar que nada sobre en tu plato, y aprenderás a no malgastar.
3No guardes así tus sobras de comida
Seguramente ya lo sabías, pues tus padres te lo enseñaron cuando vivías con ellos, no puedes guardar la comida cuando aún está caliente en la nevera ni en el congelador. Y es que además de poner en riesgo esas sobras de comida, todo lo que le rodea también estará en peligro. Incluso estarás poniendo en peligro al electrodoméstico, el cual dejará de funcionar a largo plazo.
Lo que le pasa a la comida que está alrededor de lo que has metido aún caliente, es que aumenta su temperatura, por lo que podría provocar que todos se estropeen. Si tienes prisa, y necesitas guardar tus sobras lo antes posible, mete el recipiente donde las hayas puesto en una cazuela con agua fría. Así, bajará rápidamente la temperatura, y podrás guardarlas sin riesgos.
