A lo largo de nuestra vida pasamos muchas horas durmiendo. Por ello, es fundamental contar con un buen colchón que nos asegure un sueño reparador y que evite la aparición de dolores de espalda. Con todo, la oferta de colchones puede ser muy amplia, por lo que es relativamente sencillo perderse entre tantas posibilidades. Por esta razón, a continuación, te explicamos algunos de los mejores consejos para elegir un buen colchón. Además, en tiendas de colchones como liroon.com podrás encontrar los modelos que más se ajusten a tus necesidades.
Transpirabilidad
La transpirabilidad es uno de esos aspectos que se deben tener en cuenta a la hora de escoger un nuevo colchón. Esto se debe a que la transpirabilidad determinará, en buena medida, tanto el confort como la conservación de las propiedades del colchón. Hoy en día, los colchones que garantizan una mayor transpirabilidad son los de muelles, ya sean de muelles ensacados o el tradicional Bonell.
Firmeza
Los colchones de buena calidad se caracterizan por repartir el peso del cuerpo de forma adecuada. No obstante, aunque estos deben ser firmes, no deben ser excesivamente duros puesto que acabarán resultando incómodos. En cualquier caso, un buen colchón debe respectar la curvatura de la propia espalda cuando se está boca arriba, así como su alienación cuando se duerme de lado.
Temperatura
La temperatura de un colchón está muy vinculada a su transpiración, ya que cuanto más transpira un colchón, más sensación de frescura ofrece. Además, en la actualidad, también existen colchones con partículas de gel que provocan el descenso de la temperatura del colchón. Estos modelos son ideales para las personas más calurosas o para aquellas zonas en las que en el verano aumentan mucho las temperaturas.
Adaptabilidad
En el caso de la adaptabilidad esta está relacionada, al mismo tiempo, con la firmeza y la suavidad. De este modo, la mayoría de los fabricantes de colchones combinan diferentes materiales con el objetivo de ofrecer productos que ofrezcan ambas sensaciones. Así, se pueden encontrar colchones elaborados con espumas muy firmes, pero que al estar combinadas con otros materiales aportan una agradable sensación de confort.
Tu propio cuerpo
Las personas con un peso elevado deberán escoger siempre colchones firmes, mientras que aquellas con un peso más ligero podrán seleccionar colchones más flexibles. Con respecto a la medida, un buen colchón debe superar, por lo menos, en 10 centímetros la altura de la persona que lo utilice. De lo contrario, se encontrará con la desagradable sensación de que los pies le cuelgan por fuera.
La postura
Generalmente, las personas que suelen dormir hacia arriba necesitan un colchón duro para, así, evitar la adopción de posturas dañinas para la espalda. Por su parte, las personas que tienden a dormir de lado requieren de un colchón con una dureza intermedia, especialmente adaptable a la forma de las caderas y los hombros. Asimismo, las personas que prefieren dormir boca abajo necesitan un colchón más blando, para no forzar en exceso la torsión de la columna.
Prueba
A la hora de escoger un colchón es prácticamente obligatorio probarlo. Para ello, es aconsejable vestir ropa cómoda y tomarse el tiempo necesario para ver cómo se siente nuestro cuerpo con relación al colchón. En este sentido, lo mejor es adoptar la postura con la que se suele dormir.