Rafael Nadal, uno de los mejores tenistas españoles en toda la historia del ranking ATP, estaría preparándose para vivir momentos sumamente difíciles en el ocaso de su exitosa y envidiable carrera profesional.
Si bien es cierto que el tenista oriundo de Manacor ha acostumbrado a todos sus fanáticos a verlo casi siempre levantando los trofeos más hermosos de las competencias más importantes y exigentes del año, todo indicaría que estos tendrán que tragar grueso dentro de poco, ya que es probable que no logren observarlo en el podio por un extenso lapso de tiempo.
La pandemia generada por el coronavirus no le ha sentado nada bien a ninguna persona de los cinco continentes, bien sea en el ámbito económico o personal, y parece que uno de los más afectados por esta situación que afecta completamente al mundo sería Rafael Nadal, quien estaría más pesimista que nunca en relación a diversos aspectos de su vida, principalmente en lo deportivo.
En este sentido, Rafael Nadal lo habría dejado más que en claro ante los diversos medios de comunicación después del segundo día de entrenamientos en las pistas de Roland Garros, el cual tuvo que ser movido al otoño por el coronavirus, acción que para el español condicionará en muchos aspectos al torneo.
«Estamos a nueve grados de temperatura y para jugar un torneo al aire libre estamos en una situación límite. Lloviendo casi cada día, con frío, con viento… Las pelotas también son muy diferentes a las de los años anteriores. Entrené con esta bola en Mallorca, cuando hacía calor, y ya era pesada y lenta y aquí con el frío es como una piedra. Nos tenemos que adaptar a eso. Tengo que afrontar cada día con una predisposición a aceptar todos los retos que se puedan ir presentando y superarlo desde la tranquilidad. No puedo fallar en la ilusión de hacer las cosas lo mejor posible. De todos los Roland Garros que he jugado es el que las condiciones son más negativas en general por todos los sentidos», dijo el tenista que es considerado como el mejor de todos los tiempos en pistas de tierra batida.
Asimismo, Rafael Nadal explicó que el frío, la humedad y las pelotas le perjudican con respecto a años anteriores y, a su vez, aseguró que este Roland Garros será el torneo con las condiciones más negativas de los que ha jugado en toda su carrera profesional, declaraciones que dejan entrever su preocupación ante un posible y triste fracaso en esta tan importante competición.
«Con las nuevas pelotas los partidos pueden ser incluso más largos porque cuesta mucho ganar puntos. La pelota se hace pesada y cuesta que coja los efectos. Mi trabajo es buscar soluciones a las dificultades que presenta este torneo para mí. He entrenado y he competido bien en los dos entrenamientos que he hecho», dijo el tenista español, quien intentó disipar las dudas sobre su posible fracaso en el Roland Garros.
Claramente, esto no quiere decir que Rafael Nadal no vaya a deslumbrar como siempre lo hace en todos y cada uno de los torneos en los que él participa, sin embargo, su actitud pesimista ante estas condiciones del Roland Garros podría ir preparando a sus más acérrimos fanáticos para sufrir un buen rato.
