El teletrabajo se está imponiendo en muchas empresas como consecuencia de las medidas de seguridad impuestas por la pandemia. Algunos de los empleados que se llevaron su portátil de empresa a casa pensando que tendrían que pasar varias semanas teletrabajando se dan cuenta ahora de que estos plazos pueden alargarse y necesitan adaptar su entorno a esta nueva realidad para poder rendir al cien por cien.
Tras un periodo prolongado trabajando desde casa, estos empleados entienden que no solo es importante disponer de un buen equipo de ‘hardware’ (ordenador, ‘smartphone’, pantalla, etc), sino que deben adaptar la configuración de su red. Esto es fundamental tanto para soportar mayor tráfico -en videoconferencias, presentaciones de ‘webinars’ o volcado de grandes archivos en servidores ‘cloud’ o físicos- como en la esencial faceta de la ciberseguridad.
Esta situación puede partir de problemas más pequeños, como la falta de puertos USB en el ordenador, a la seguridad de la red y su rendimiento. Si un empleado va a trabajar desde su domicilio durante un largo periodo debe resolver determinados problemas y valorar algunos cambios en su red para evitar incidentes, tal y como explican los expertos de D-Link, que han creado una ‘Guía para el teletrabajo’ centrada en estos aspectos.
ROUTER, EL CORAZÓN DE LA RED
Cuando se trata de Internet y de la gestión de la red local, el ‘router’ es la clave. Mucha gente opta por mantener el mismo aparato que le regaló su proveedor de servicios al conectarle por primera vez a la red, pero esta decisión podría estar limitando la velocidad, así como la seguridad de sus datos. Los expertos en la materia explican que el ‘router’ debería contar con, al menos, WiFi 5 -la tecnología más extendida- y cuatro puertos de red LAN Gigabit (1000Mbps).
«Vigile este aspecto porque muchos ‘routers’ de las operadoras o antiguos llevan puertos de red LAN Fast Ethernet 10/100, lo que limitaría mucho su ancho de banda aunque tenga contratados 600Mb», detallan desde D-Link, que pone como referencia su familia EXO, con ‘routers’ que van desde 750 Mbps hasta 3000 Mbps, todos con doble banda: 2.4GHz y 5 GHz (la función ‘Band Steering’ del ‘router’ conecta cada dispositivo a la banda más compatible).
Otra de las dudas más comunes es si merece la pena conectar el ordenador por cable al ‘router’ o trabajar mediante conectividad WiFi. La conexión por cable suele ser la opción más potente, pero hay portátiles o tabletas que no disponen de los puertos de conexión necesarios. Por ello, D-Link plantea una tercera vía, con sus HUB USB-C, que integran un puerto de red LAN en un pequeño dispositivo ‘Plug&Play’ (que basta con conectar y poner a funcionar).
Los usuarios también se preguntan si cualquier ‘router’ es compatible con su operadora. «Nuestros dispositivos son neutros, así que solo tiene que configurar el ‘router’ de su operadora en modo ‘bridge’ y deshabilitar el WiFi por defecto y conectar uno de nuestros modelos como nuevo ‘router'», detalla la compañía.
CÓMO CONFIGURARLO PARA OBTENER RENDIMIENTO Y SEGURIDAD
Con más personas trabajando en casa que nunca, la mayor parte de los empleados tiene información crítica en sus portátiles. Por ejemplo, si trabaja en Recursos Humanos tendrá una base de datos de detalles del personal, en Marketing tendrá bases de datos de clientes externos y en Finanzas tendrá registros muy sensibles. Es decir, la seguridad de la red doméstica debe ser del mismo nivel que cuando el trabajador está en la oficina. Muchas funciones se pueden controlar desde el propio ‘router’.
Una de las principales recomendaciones es crear una red de invitados. No es buena idea dar a los invitados la clave WiFi, ya que les puedes estar dando acceso a toda la red, incluyendo el disco duro del portátil si está encendido y un largo etcétera de accesos a datos corporativos o privados. Puede ser que en alguno de sus móviles haya un troyano u otro tipo de virus capaz de acceder y copiarse a la red local. Por evitarlo es importante que el ‘router’ permita crear fácilmente una red de invitados o ‘Guest Zone’, creando una red WiFi con otro nombre y contraseña y, lo más importante, sólo dando acceso a internet, no a la red local.
Otra opción interesante es trabajar abriendo una VPN o Red Privada Virtual, un medio utilizado para cifrar los datos y proteger la identidad mediante la adición de una capa de privacidad. Puede usarse para acceder a la red de la oficina desde una ubicación remota, estableciendo una conexión segura y permitiendo acceder a datos o imágenes importantes sin que nadie espíe estas actividades.
Por otra parte, para mejorar el rendimiento, los expertos de D-Link recomiendan activar la opción ‘Quality of Service’, que indica al ‘router’ cómo priorizar el ancho de banda en la red para que pueda mejorar el rendimiento del tráfico crítico. De esta forma, se puede dar prioridad al portátil del trabajo para que no se produzca ningún corte de conexión mientras otros miembros del hogar disfrutan de una película en calidad 4K en una plataforma como Netflix.