Viggo Mortensen, Premio Donostia 2020, debuta como director con ‘Falling’

El actor y ahora también director y guionista Viggo Mortensen (Watertown, Nueva York, EEUU, 1958), que este jueves recoge el Premio Donostia en el 68 Festival Internacional de Cine de San Sebastián, ha presentado en este marco su debut como director, ‘Falling’, un drama familiar con «rasgos autobiográficos» sobre la «dificultad de comunicarse» que tienen algunas personas.

En rueda de prensa en San Sebastián, Mortensen ha presentado este filme, cuyo guión y dirección firma, además de interpretar uno de los papeles principales, el de un hombre que vive con su marido y su hija adoptiva en California hasta donde llevará a su padre, un granjero solitario, terco y conservador, interpretado por Lance Henriksen, iniciando un camino «lleno de heridas hacia la aceptación y el perdón».

Mortensen ha explicado que en este filme quería hablar de la comunicación entre personas, en la familia, en la sociedad, en un momento en el que, además, «vivimos una especie de primavera negra, con políticos que presumen de un doble papel de pirómanos y bomberos».

Además, ha opinado que en estos momentos de pandemia por covid-19 somos más conscientes de «cuan precaria» es la situación de algunas personas mayores y lo «aislados que están», pero eso «siempre ha estado ahí, la vida es limitada, es un regalo y haces lo que quieres con ella». En este sentido, ha indicado que su película tiene que ver «con la edad, el temor de enfermar, de morir, cuánto es demasiado a la hora de cuidar a alguien y las dificultades de comunicación, la capacidad de perdonar y perdonarte a ti mismo.

Según ha apuntado, para hacer esta película, que dedica a sus hermanos, ha revisitado sus recuerdos, «algunos complicados», su infancia queriendo explorar los sentimientos por sus padres, algunos de los cuales «se ven en detalles, fragmentos de conversación que mis hermanos reconocieron», sin olvidar que es «una ficción». «Hace aflorar los sentimientos pro mi padre, mi madre, y lo que me han enseñado», ha añadido.

PREMIO DONOSTIA

Sobre el Premio Donostia, que recibirá esta tarde, el actor y director se ha mostrado «algo nervioso» y ha agradecido este reconocimiento que le hace «feliz» a él, a su familia y amigos, y que supone incluirle en «la impresionante lista de artistas» que han sido reconocidos con este galardón y que así se le «incluya en la historia del cine».

«Cuando tenía unos tres años y mi madre me llevó al cine por primera vez, desde entonces siempre me ha interesado formar parte del cine», ha confesado, al tiempo que ha manifestado que le ha interesado el séptimo arte «por la calidad de lo que se cuenta».

Preguntado por el agradecimiento, entre otros, que aparece en los créditos de ‘Falling’ a la fallecida cineasta Agnès Varda y a su hija Rosalie Varda, Mortensen ha recordado que tuvo la «suerte» de conocer a esta directora «única» poco antes de su muerte en un avión, volviendo del festival de Marrakech.

Rosalie le cambió el asiento para que se sentara junto a su madre y ambos estuvieron hablando durante unas tres horas «de todo, de la vida» y «de la importancia de no mostrar las cosas, de no contarlo todo». «De dar ganas al espectador y crear en él un deseo de ver las cosas por sí mismo», ha añadido, para incidir en que eso fue «valioso» a la hora de «afinar» el guión de ‘Falling’, para el rodaje y el montaje. «Es algo en lo que venía pensando, pero no tenía las palabras tan elocuentes como Varda», ha explicado.

Otro agradecimiento es a Peter Jackson, que ha reconocido fue «como una escuela de cine que duró año y medio» para él. «Fue increíble ver cómo aprendió ese equipo», se ha referido, en alusión al rodaje de ‘El señor de los anillos’.

Por otro lado, Mortensen ha afirmado haber tenido «mucha suerte» en su carrera, pero ha reflexionado sobre el hecho de que «hay que estar listo para un golpe de suerte». «Si no estás preparado y enfocado, no vas a reconocer el potencial de algo posible, una historia, un cuento, una idea para un guión, un guión extraño o diferente», ha opinado.

SUERTE

«No conozco otra vida, mi vida está muy vinculada desde hace 38 años al cine de alguna manera, al deseo de formar parte poco a poco, de ir aprendiendo, y nunca he perdido la curiosidad, siempre me ha interesado y me sigue interesando el rompecabezas de cómo llevar un guión a la pantalla, cómo se hace, qué sacrificio tiene que hacer un equipo para que se haga bien», ha afirmado.

Así, ha señalado que hay guiones «muy buenos» que han acabado en películas «muy malas, porque no se ha hecho ese trabajo colectivo» y al revés.

También ha reconocido que a la hora de escribir un guión y hacer una película te influye «todo lo que ves y escuchas», y ha resaltado que, a su juicio, es «muy importante tratar bien a todos los candidatos» del casting, recordando que la mayoría de las veces, cuando no te cogen para un papel, ni te avisan, y son «largos silencios» tras lo cual te enteras por la prensa de quién ha sido el elegido para interpretar un papel.

Preguntado por su papel en ‘Falling’ ha señalado que no era su idea inicial, «y menos en un papel tan importante», pero era «necesario para finalizar la película». Lance Henriksen, que hace de padre, «estaba algo nervioso» y Mortensen ha señalado que se sintió «seguro» al tenerle a él en el papel de hijo, y su trabajo ha sido «buenísimo».

En este contexto, ha opinado que el hecho de que seas actor y «no significa que vayas a ser un buen director de actores». «Si has sido un actor que solo se queda en el camerino, se aprende su texto, inflexible, se pierde algo, no disfrutan de la posibilidad de que algo les sorprenda y les influya para hacer algo diferente», ha considerado, pero, sin embargo, ha indicado que «si tienes curiosidad, tendrás posiblemente la posibilidad de conectar más fácilmente con los actores».

Finalmente, ha afirmado que su intención es «seguir dirigiendo», aunque para «ganarse la vida» va a tener que seguir actuando. «No me he hecho rico haciendo ‘Falling’, todo lo contrario», ha ironizado.