Freír patatas parece sencillo pero, ¿te quedan crujientes? ¿son igual de sabrosas que las que comes en casa de tu madre? Hoy te vamos a dar unos trucos para que tus patatas queden crujientes y sabrosas sin que tengas que acudir al restaurante de comida rápida. Ya ves que allí tienen unas freidoras gigantes, donde las patatas nadan en aceite y claro, quedan crujientes, pero también están bañadas en grasa.
No significa que no puedas ir de vez en cuando, pero cuando aprendas estos trucos, ¡no vas a querer salir de casa!
6Utilizo sartén para freír, ¿cuál es la mejor para que mis patatas salgan crujientes?
En primer lugar, recuerda aquello de «lo barato, sale caro». Es mejor invertir en una sartén más cara y asegurarnos que durará mucho tiempo a tener que estar comprando sartenes cada mes.
Busca una sartén antiadherente, que no se pegue. Además son de fácil limpieza. Las de aluminio forjado son muy buenas y resistentes; las de titanio ayudan a repartir el calor por toda la sartén a partes iguales. Las de hierro fundido nos van a servir para más cosas aparte de para freír patatas y las de hierro mineral B que son excelentes para freír; con un sistema antioxidante que va a hacer que la sartén no se ponga fea nunca.
Todas las sartenes de buena calidad, están hechas con unos materiales tan seguros que no tendrás problema con que se rallen ni que desprendan algún tipo de sustancia que nos pueda perjudicar en nuestra salud. Lo que si es muy peligroso es usar sartenes viejas, donde se van cayendo los pedazos de teflón y eso, al final, acaba en la comida.