El sector de la restauración colectiva, encargada de dar de comer en comedores escolares, universitarios, empresas, hospitales, residencias y establecimientos deportivos y culturales, entre otros servicios, prevé la caída del 50% de las ventas globales del sector por el impacto del coronavirus, según informa en un comunicado.
En concreto, el sector calcula ya un descenso del 43% de su facturación en lo que va de año, en una situación de práctica paralización que mantiene al 53% de sus más de 90.000 empleados en ERTEs.
La restauración colectiva subraya que todos sus segmentos de actividad están sufriendo un descenso que «pone en peligro» la continuidad de muchas empresas y el mantenimiento de algunos servicios como comedores escolares o de empresa, e incluso algunos servicios de restauración en el ámbito hospitalario.
En este sentido, desde Food Service España destacan especialmente la «importancia de prolongar los ERTES de fuerza mayor a partir del próximo 30 de septiembre, ya que de lo contrario supondrá la desaparición de muchas empresas y, en consecuencia, no se podrán prestar servicios básicos de alimentación en comedores de empresas, colegios, residencias», ha señalado el presidente de Food Service España, Antonio Llorens.
En estos momentos, el sector reitera que necesita «más que nunca, ayuda y escucha» por parte de la Administración para afrontar un proceso de transformación del sector que va más allá de un impacto coyuntural.
